Alemania ve posible excluir de la Eurozona al que la desequilibre

En su alocución parlamentaria ante el Bundestag, Angela Merkel ha deslizado que tal mecanismo podría aplicarse a aquellos de los 16 estados de la zona monetaria del euro que «una vez y otra y a lo largo del tiempo» quebraran dichas reglas de la sensatez y la moneda común. En esto la canciller vuelve a respaldar a su ministro de Hacienda, como ha hecho también con su idea de crear un Fondo Monetario Europeo.

En menos de una semana, responsables políticos de la mayor economía de la UE y tercera del mundo se han referido pues en dos ocasiones a esta posibilidad de la expulsión del euro, negada sin embargo tanto por París como por el presidente de turno de la UE, José Luís Rodríguez Zapatero. También ha reaccionado en contra el presidente del Banco Central Europeo (BCE) que habló para Le Point antes de conocer la manifestación de Merkel y calificó como "hipótesis absurda" tal especulación.

De otro lado, Merkel vuelve a descartar cualquier apresuramiento con Grecia, cuyo estado de cuentas se niega por principio a salvar, a sabiendas no sólo de las trampas a costa del resto sino preguntándose porqué debería, el ciudadano alemán, rescatar con su trabajo al ciudadano griego cuando éste -como el italiano- se jubila antes que el alemán.

"El euro se enfrenta al mayor desafío desde su creación", agregó, pero Alemania no prevé dar una ayuda "precipitada" a Grecia: "un rápido acto de solidaridad no es la respuesta adecuada". Merkel subrayó que por ahora "no hay alternativas al programa de austeridad griego". La canciller ha elogiado a éste, declarando que a la postre "el Gobierno griego ha mostrado un gran coraje", tras su promesa firme de recortar su déficit y dejarlo por debajo del 3% en 2012.

En medio del debate fiscal, Angela Merkel ha querido defender el enorme endeudamiento que contemplan los Presupuestos Generales del Estado de este año. Lo considera una medida anticrisis necesaria y ha querido preparar a la población para las "difíciles medidas de ahorro" que se avecinan.

"Hemos presentado unos presupuestos que contemplan un endeudamiento de 80.200 millones de euros, frente a un gasto total de 320.000 millones. Eso significa que el 25% son deudas y que uno de cada cuatro euros no está compensado con ingresos", ha admitido la canciller tras admitir que se trata del mayor endeudamiento jamás registrado en la República Federal de Alemania (RFA).

La canciller asegura que la decisión de aumentar desmesuradamente la deuda -el doble del presupuesto Kohl de 1996, que ostentaba el record- se debe exclusivamente a la necesidad de impulsar el crecimiento como vía alemana contra la crisis. Merkel quiso apostillar que "Alemania ha sido el único país en el mundo" que en plena crisis ha introducido en la Constitución un tope para el déficit.

Como se sabe, a partir de 2011 el gobierno deberá aplicar constitucionalmente una estricta política de austeridad, con el fin de alcanzar en 2016 un déficit máximo de 0,35 por ciento del producto interior bruto (PIB). El presidente del Eurogrupo, de ministros de Hacienda del euro, sugirió ayer que todos deberían introducir medidas similares de autocontención de la deuda: "tengo una gran simpatía por la opción alemana para imponerse contención" en el endeudamiento y "creo que deberíamos considerar también todos en la zona del euro", para forzar unos límites por ley.