¿Cómo se utilizan BlaBlaCar y Uber?

Si se quiere utilizar BlaBlaCar , la plataforma que conecta a personas que quieren compartir los gastos de un viaje en coche a un destino común, hay que elegir si se quiere ser conductor y ofrecer una ruta o, de otra manera, ocupar una plaza que haya ofrecido el conductor en cuestión

Antes que nada, lo primero que pide BlaBlaCar es registrarse en la página, que puede realizarse a través de Facebook (en dos segundos, según la compañía) o mail (en 30 segundos, en este caso). Y, después, elegir entre ocupar plaza o proponer ruta.

Si se quiere ofrecer un trayecto, BlaBlaCar te pide información básica como el lugar de salida, el de destino y el día y la hora en que se va a iniciar el viaje. Además, preguntan sobre si habrá ciudades de paso para recoger pasajeros y si es un traslado habitual o puntual.

Hecho esto, en el siguiente paso para detallar el resto de la información necesaria hay que especificar el número de plazas disponibles, el dinero que tiene que aportar cada ocupante (con una recomendación sobre este aporte), el tipo de equipaje, el margen de retraso respecto la hora señalada y detalles adicionales que se quiera.

¿Y si necesitas una plaza? En la misma portada de BlaBlaCar aparece esta misma opción, en la que hay que detallar el lugar de salida y el de destino. Una vez hecho esto, en la siguiente pantalla aparecen las distintas ofertas en esta ruta, para que se filtren según las necesidades del usuario.

Elegida ya la oferta más adecuada, sólo queda leer la información añadida del conductor y contactar con él, vía teléfono, para solicitar una plaza en su vehículo en esa ruta.

Para utilizar Uber , al igual que BlaBlaCar, es necesario registrarse para poder sacarle provecho a la aplicación. En dicho registro exigen el número de la tarjeta de crédito, que servirá para poder pagar los traslados sin llevar efectivo si hiciera falta. Y luego descargarse la aplicación, que es gratuita.

Como explican en su propia web, Uberdetecta tu ubicación usando el GPS de tu teléfono y te conecta con el conductor más cercano a ti. Incluso si no sabes la dirección exacta, te pueden recoger en cualquier lugar.

Cuando pidas un viaje, Uber te busca un conductor y te dice dónde se encuentra en el mapa. Luego te enviarán un mensaje de texto con la llegada del conductor. El nombre del conductor y los detalles del auto aparecerán en la aplicación e incluso puedes enviar un mensaje de texto o llamar. Además, en la propia aplicación se pueden consultar las tarifas de recogida y retorno para saber cuánto te va a costar el trayecto.

El coste se carga automáticamente a una tarjeta de créditoY, como se mencionaba al principio, no es necesario llevar dinero en efectivo cuando viajes con Uber. Una vez que llegues a tu destino, la tarifa se carga automáticamente a tu tarjeta de crédito guardada en el registro, y además no es necesario dejar propina. También explican que te envían un recibo a tu correo electrónico notificando el pago.

Uber tiene 5 tipos de servicios y, se supone, que dependerá de la ciudad en la que se esté para poder utilizar todos: UberX («autos para todos los días para usar todos los días. Mejor, más rápido y más barato que un taxi»), UberTAXI («no necesitas silbar, agitar los brazos ni tener efectivo»), UberBLACK («autos para todos los días para usar todos los días. Mejor, más rápido y más barato que un taxi»), UberSUV («para aquellos momentos en que necesitas un poco más de espacio») y UberLUX (los autos más elegantes con tarifas a la medida).

En la actualidad, su servicio está disponible en ciudades de casi 40 países: a España llegó el pasado mes de abril pero de momento sólo está disponible en Barcelona. Para integrarse en la «plantilla» de Uber basta con tener coche propio con su correspondiente seguro además del carné de conducir en regla.