El empleado actual trabaja más pero es más feliz

De la encuesta realizada a principios de año a 8.800 trabajadores europeos, 800 eran empleados españoles. Esta satisfacción con su puesto de trabajo , de hecho, ha incrementado un 1% con respecto a la respuesta de los encuestados en 2008, en pleno inicio de la crisis. Una mejora que también se ha notado en el grado de implicación de los empleados en su labor. A principios de la recesión tres de cada cuatro (el 75%) aseguraba sentir que cumple con su trabajo. Hoy en día, esta cifra se eleva al 81%.

Cumplir con los cometidos bien puede tener que ver con pasar horas en la oficina. En comparación con hace seis años, el 84% cree que dedica «demasiado tiempo» al trabajo. Una proporción aún mayor si analizamos únicamente las respuestas de directivos. Y no solo se desempeña el puesto en la oficina ya que la mayoría de los profesionales españoles (directivos en particular) afirman que trabajan fuera del horario laboral. No porque quieren: un 81% afirma que le reclaman fuera de su horario y un 94% se siente obligado a solucionar dichos problemas.

Pese al exceso de carga laboral un 62% está bastante satisfecho con el quilibrio entre su vida laboral y personal. Otro 60% lo está con su horario. Eso si, con los años de crisis, el grado de motivación ha disminuido progresivamente para uno de cada cuatro empleados.

Hoy en día, lo que más preocupa a un trabajador es poder conservar su puesto laboral. Una inquietud que, comprensiblemente, ha aumentado un 17% en tiempos de crisis . Además, en el caso de llegar a perder su empleo, el 65% cree que no le sería fácil encontrar uno similar.