Camino despejado para Djokovic y oportunidad para Davidovich

Pero, para alegría de Djokovic, las grandes sorpresas se han producido en la parte baja del cuadro, la suya. La primera, quizá la mayor, la de Holger Rune, número cuatro del mundo, que cayó con estrépito en la jornada inaugural frente al español Roberto Carballés. En segunda ronda, mientras Djokovic despachaba con facilidad al también español Bernabé Zapata, otros dos favoritos se despedían de Nueva York: Stefanos Tsitsipas -aunque el griego es un habitual de los descalabros- caía en cinco sets frente a un desconocido, el suizo Dominic Stricker; y a Casper Ruud, finalista aquí el año pasado, que ha llegado hasta la última ronda en tres 'grandes', le ocurrió lo mismo ante el chino Zhang Zhizhen.

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Javier Ansorena

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En tercera ronda, Djokovic se enfrentará con otro serbio, Laslo Djere, y, por mucho cariño que tenga hacia su compatriota, no le dará opción. El rival más complicado que anticipa para cuartos de final sería el estadounidense Taylor Fritz, cabeza de serie número nueve, cuyo mejor desempeño en 'Grand Slam' fue el año pasado en Wimbledon, cuando cayó con Rafael Nadal en esa misma ronda.

Y en semifinales, lo más difícil que podría encontrarse es con alguno de los dos estadounidenses con más posibilidades, Tommy Paul o Francis Tiafoe, o, y aquí está la buena noticia para el tenis español, con Alejandro Davidovich.

La espantada de favoritos aclara también el camino para el malagueño, que empezó la temporada de pista dura de verano norteamericana muy bien -llegó a la semifinal en Toronto, se tuvo que retirar ante Djokovic en Cincinnati- y al que se ha visto muy sólido en sus dos primeros partidos en Nueva York, donde, como el serbio, no ha cedido ningún set.

Davidovich tendrá un rival duro en tercera ronda, Paul, y podría verse con Tiafoe en cuartos de final. Una oportunidad de oro para encontrarse con Djokovic en una semifinal de un grande y, por qué no, intentar el milagro.