WIMBLEDON
Stakhovsky destrona a Federer
El ucraniano, 115 del mundo, dio la campanada al derrotar en segunda ronda al vigente campeón del torneo británico
Stakhovsky destrona a Federer
Sergiy Stakhovsky protagonizó la gesta de un miércoles negro en Wimbledon. El ucraniano, 115 del mundo, derrotó a Roger Federer en la segunda ronda por 6-7 (5), 7-6 (5), 7-5 y 7-6 (5), un resultado sonadísimo y que ... deja a Londres sin su vigente campeón. Federer es un héroe en la hierba británica, que ha conquistado hasta en siete ocasiones, pero está lejísimos de ser el jugador que hace un año triunfaba otra vez . Ante Stakhovsky volvió a pecar de falta de tensión en los momentos decisivos. [Así lo hemos contado]
Pese a conquistar Halle hace un par de semanas, Federer se pierde en un mar de errores. Su temporada está llena de altibajos y siempre se le tiene en cuenta porque le acompaña la leyenda, campeón de 17 grandes, un tenis ta superlativo al que siempre se le recordará por su estilo único. Ahora, cerca de los 32 años, sufre ante tenistas con mucho menos pedigrí. Stakhovsky es un ejemplo.
El ucraniano, de 27 años y con cuatro títulos en su palmarés, resiste en el pelotón como puede, lejos de su mejor nivel. Llegó a ser el 31 de la ATP en 2010 y en la hierba exhibe con muy buen gusto su talento. Un revés a una mano muy aseado, muñeca fina en la red y un servicio muy seguro. Pese a perder el primer set, revirtió la situación y fue una tortura para el helvético.
Federer nunca había perdido en la segunda ronda de un Grand Slam. De este Wimbledon se despide por la puerta de atrás, más relevante su polémica con las zapatillas que su tenis. Tuvo que cambiarlas ante Stakhovsky porque la suela que uso ante Victor Hanescu era completamente naranja e incumplía con el código de vestimenta , pues en Londres se exige que mande el blanco. Patinó estrepitosamente con el nuevo calzado.
Fue un encuentro bonito, con intercambios de altura. Stakhovsky estuvo fantástico y a medida que avanzaba el debate se crecía. Atacó cuando tocaba y se defendió bien siempre que Federer daba un paso al frente. Era su tarde, era su gran día en Wimbledon, en donde llegó a octavos en 2008 como mejor resultado.
A Federer, por contra, le faltó alegría y ya no es novedad . Sigue regalando golpes de maestro, auténticas maravillas para recordar, pero no compite con el mismo ímpetu. Cuando tuvo ventaja, se enredó y permitió que Stakhovsky se subiera al carro ganador.
El segundo set marcó el desenlace. Se lo llevó el ucraniano en el juego decisivo y desde ahí no se detuvo. Fue una tortura para Federer en la red, fiel a la norma que antes se exigía para ganar en Wimbledon, el saque-volea. Fue un recital en la red, una lección que puso a la central patas arriba.
Federer pudo llevar el debate al quinto set, pero desaprovechó sus opciones en el cuarto. Se volvió a decidir en el tie break y Stakhovsky fue más y mejor, como durante toda la tarde. ahora se enfrentará a Jurgen Melzer mientras Wimbledon llora por la pérdida de su campeón.
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