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Partido con trampa en el Bernabéu

El Madrid defiende esta noche el 2-5 de la ida en Anfield ante un Liverpool que llega al Bernabéu sin nada que perder, como el Chelsea el curso pasado

Real Madrid Club de Remontadas

Madrid

14/03/2023
Actualizado 15/03/2023 a las 09:36h.

«Es imposible decirle a los jugadores, olvídate de la ventaja. La ventaja está ahí. Es un dato», le comentó Ancelotti a sus jugadores el día antes del partido de vuelta contra el Chelsea de la pasada temporada. «No teníamos nada que perder y eso ... nos ayudó», cuenta Tuchel de aquel encuentro de vuelta de cuartos de Champions que a punto estuvo de costarle un disgusto al Real Madrid. Los blancos habían vencido 1-3 en Stamford Bridge, pero en el Bernabéu todo salió mal. Gol en contra en los primeros quince minutos, 0-2 antes del descanso y 0-3, resultado que momentáneamente volteaba la eliminatoria, a falta de quince minutos para el final.

«Creo que ha sido uno de los momentos que más he sufrido en mi carrera», recordaba ayer Ancelotti en la sala de prensa de Valdebebas. Aquel día entró al vestuario, tras celebrar junto a su cuerpo técnico la agónica clasificación, y no dejó de resoplar y frotarse los ojos mientras echaba un primer vistazo a su teléfono móvil: «Si no muero hoy, soy inmortal», dijo ante la cámara que seguía su emocionado e íntimo festejo. La idea es que aquel dramático partido no se vuelva a repetir esta noche, en la vuelta de octavos ante el Liverpool.

El Madrid tiene una jugosa ventaja de Anfield (2-5), pero también la tenía frente al Chelsea. Suena a utopía que los de Klopp puedan vencer por cuatro goles de diferencia en el Bernabéu, pero el fútbol actual ha dado muestras de sobra para pensar que nada es imposible: «A nivel psicológico es un partido más complicado para nosotros que para ellos. Ellos vendrán a tope, pase lo que pase. Nosotros también iremos a tope desde el primer minuto, pero el resultado de la ida nos hace tener más dudas que el rival».

La receta podría parecer sencilla, pero luego en el campo no es tan fácil cocinarla. Tener tres goles de ventaja es una bendición, pero también un dilema a la hora de afrontar el partido. En esta ocasión, el mensaje de Ancelotti es contundente: «No vamos a hacer cálculos. Eso lo entienden los jugadores. Tenemos que hacer bien las dos cosas: defender y atacar, pero no pensamos solo en defender, sino que pensamos más bien atacar. La idea es repetir el partido de la ida».

Precedentes

El mal trago ante el Chelsea, resuelto finalmente con un estallido de júbilo, se ha repetido en otras tres ocasiones en los últimos años. En 2015, la primera etapa de Ancelotti en el banquillo blanco, el Madrid se trajo un 0-2 de la ida de octavos ante el Schalke, pero en el Bernabéu el equipo alemán llegó a igualar la eliminatoria y acabó en un 3-4 final, a solo un gol de ser eliminado.

En 2018, el susto lo dio la Juventus. El Madrid había vencido la ida de los cuartos en Turín (0-3), en un partido marcado por el antológico gol de chilena de Cristiano, aplaudido por la grada bianconera. En la vuelta, los italianos barrieron al Madrid y empataron el emparejamiento. Un polémico penalti anotado por Cristiano, en el minuto 93, salvó en la campana a los blancos (1-3), entonces entrenado por Zidane.

Contra quién salió cruz fue ante el Ajax, en 2019. El 1-2 de la ida en Ámsterdam fue insuficiente. 1-4 en el Bernabéu, en un partido que le costó el puesto a Solari y dejó señalado a Sergio Ramos, entonces sancionado, por grabar parte de su documental de Amazon con sus reacciones en el palco a aquella ingrata eliminación.