El Real Madrid al fin ganó al Barça

Conozco muy bien a las campeonas, ya que durante mi paso profesional por el Real Madrid como director y responsable de captación de la cantera fiché a seis de las titulares de la final: Bibi Casquero, Silvia Blasco, Irune, Adriana Folgado, Paula Comedador y Marisa. A ellas hay que sumar Amaya: recomendé su fichaje por activa y por pasiva durante toda la temporada y, finalmente, cuando tuve luz verde de Begoña Sanz, fue demasiado tarde y no nos quedó otra que incorporarla a la siguiente. Del resto de la convocatoria, aunque no fueron titulares, también fiché a Andrea Alonso (la mejor portera joven de España), Ale Gómez, Vito Rossi (la única que sobrevive del CD Tacón) y Erika del Pino.

Silvia Blasco es una versátil lateral que puede jugar en ambos perfiles. Irune, mediocentro que destacaba en edades tempranas, pero a la que los críticos achacaban por entonces poca estatura, como es normal, acabó dando el estirón. Le queda tralla, porque es de 2008 y tiene aún mucho recorrido. Adriana Folgado tiene el honor de ser la primera canterana del Real Madrid en marcar un gol en categoría nacional. La atacante Marisa (2006) fue de las últimas en incorporarse dentro del plan estratégico que había diseñado y que marcaba que debíamos tener una jugadora por año, sobre todo en la columna central: portera, central, pivote y delantera centro. Teníamos a Ari Arias (2003), Martuka (2004), Carla Camacho (2005) y Erika del Pino (2007). Marisa había ido por delante de Carla Camacho a la selección madrileña en la primera fase del campeonato de España 2020. En cambio, en su club, el Madrid CFF apostaban por Alba Rodao. La incorporamos y no nos equivocamos: ya ha debutado en el primer equipo y fue la autora de los dos goles de la final frente al Barça. Bibi Casquero (hija de Javi Casquero), tiene una velocidad endiablada. Fue la primera hija de futbolista que se incorporó al Real Madrid. Posteriormente lo hizo María González, hija de Raúl, y este verano lo hará la hija de Roberto Carlos, proveniente del Madrid CFF. 

Paula Comendador, a fecha de hoy considerada la joya de la cantera, jugaba hace 15 días con el primer equipo. Primer balón que tocó, gol que transformó,y tres puntos. Intuyo que le pasará lo mismo que a las anteriores joyas. Ari Arias, a punto de fichar por el Wolsfburgo, cuando estaba en la dinámica del primer equipo, vio como fichaban antes a Esther y a Nahikari. Y acabó saliendo. Esther y Nahikari también.

Paula Partido, esta temporada cedida en el Celtic de Glasgow, vio con pena que cuando podía formar parte del primer equipo, el club prefirió fichar a Raso y a Linda Caicedo. Carla Camacho, víctima del maldito ligamento cruzado, tiene por delante a Bruun, a Feller y a Moller, que Toril utiliza como delanteras centro. Y la incorporación de Alba Redondo se lo complica todavía más. Comendador tiene por delante a Athenea, renovada cuatro años, Linda Caicedo, Feller y Moller. Y este año se incorpora Eva Navarro.

La ya comentada falta de planificación de la sección se ve plasmada una vez más en la cantera, que, sin duda, es espectacular. Y aunque las canteranas tiren la puerta abajo (la frase que Ana Rossell, directora deportiva, repetía como un mantra a una de estas jugadoras,) la vida sigue igual. Rosell siempre decía: «Aquí juegan las que tienen que jugar, no las mejores». O mucho cambian las cosas o veremos a esta magnífica hornada de jugadoras triunfar fuera de Valdebebas.