Pero aún hubo un hueco para un sobresalto en el patio de butacas del Teatro del Chatelet y en las casas de millones de aficionados de todo el mundo, sobre todo en las de los madridistas. Sucedió en la categoría de 'Mejor club del año', en la que, contra todo pronóstico, el club español acabó tercero.
Pese a que la pasada temporada sumó a su palmarés una liga y una Champions League, quedaron por delante del equipo de Carlo Ancelotti el Liverpool y el Manchester City, siendo los 'citizens' los premiados en este apartado de la gala. Una decisión que sorprendió tanto por los dos títulos antes mencionados como por el hecho de ambos equipos ingleses fuesen víctimas de los blancos en su camino hacia la conquista de su último título europeo. Los de Pep Guardiola en las semifinales y los 'reds' en la final.
El premio al City, en el que pesaron sus seis futbolistas en la lista del Balón de Oro, cinco masculinos y una femenina, rompió la hegemonía de la liga española en esta edición del prestigioso galardón, en la que Real Madrid y Barça atrajeron todos los focos.
El tercer puesto del Real Madrid provocó de manera inmediata un sinfín de reacciones en la siempre atentas redes sociales, en las que incluso algún ilustre madridista como Íker Casillas tiró de ironía para referirse a este feo al campeón de España y Europa: «Enhorabuena al Real Madrid por esa tercera posición...»
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