Lopetegui tiene un «plan Mariano»

Los diecisiete minutos disfrutados frente a la Roma significaron su segundo partido de competición europea con el equipo blanco. El primero lo vivió con Zidane hace dos temporadas. El francés le aconsejó que se marchara a otro equipo para tener una continuidad de juego y demostrar su valía. Si lo conseguía, volvería. Cumplió el reto. Ha regresado con Lopetegui al mando. Frente al conjunto romano jugó su primer encuentro de la temporada, tras cuatro jornadas ligueras sin estrenarse con el Real Madrid. A partir de ahora será un titular sin sitio oficial en la alineación inicial, ese once que piensa desbancar.

Mariano espera volver a tener minutos mañana, frente al Español. El miércoles sustituyó a Bale, no a Benzema, el delantero centro titular. Fue un mensaje del entrenador. Mariano no será únicamente el relevo del francés , pues el «nueve» no ejerce de artillero, sino que se mueve por las bandas y deja huecos a sus compañeros para rematar. El hispano-dominicano será el revulsivo del técnico para encontrar el gol y deshacer situaciones complicadas.

Ante el conjunto italiano salió con un 2-0, en un Bernabéu de fiesta y con Real Madrid de contragolpe. Mariano se tomó el partido como una guerra. «Así es él, siempre sale a presionar, a morder, a disparar en cuanto recibe el balón, nunca se relaja», señalan los ayudantes de Lopetegui. El ariete echó el aliento a los centrales y al guardameta del rival, hasta descolocarles, para firmar un golazo en un disparo precioso. Esa eficacia en tan poco tiempo es muy importante para el técnico. «Está hecho como futbolista, no siente el miedo de estar en el Real Madrid, ha madurado, va a jugar mucho», señala otro profesional del club.

Desde ahora tendrá bastantes oportunidades. Recibirá partidos como titular cuando Benzema descanse y será uno de los cambios fundamentales en los segundos tiempos. La rueda de encuentros cada tres días que ha comenzado le concederá bastantes opciones. Y si reitera su capacidad anotadora se convertirá en uno de los catorce fijos, junto a Asensio. Su obsesión es decidir puntos con sus goles para dar el salto definitivo. «Cuando recibe el balón lo para y dispara, a veces tira a la primera, según viene, va directo al gol, su fútbol no tiene literatura, es un jugador que no tenía el Real Madrid», señala un técnico de la casa.