Un Bernabéu de acero, futurista e interactivo

La remodelación del estadio tiene todas las licencias para atacar la reforma. Las obras comenzarán nada más acabar la Liga, el 20 de mayo, como adelantó ABC. El coliseo tendrá una cubierta fija y otra retráctil, que ascenderá desde abajo para cerrar el campo y regatear la lluvia, la nieve y el frío. Las localidades serán prácticamente las mismas, 81.044 espectadores, pero habrá nuevas zonas de palcos VIPS y mil plazas para persona con discapacidad. Las torres de acceso serán reconstruidas. El estadio será mucho más cómodo, futurista, bien conectados digitalmente, con el objetivo prioritario de ofrecer una estancia agradable en su recinto.

Se va a mejorar de manera ostensible el museo del Real Madrid, el sitio más visitado de la capital tras la pinacoteca de El Prado. Será mucho más amplio e interactivo. Y se potenciará el Tour del Bernabéu, que dura hora y media y que a partir de ahora añadirá un recorrido extraordinario por las zonas de obras, para presenciar la remodelación desde dentro. Con el fin de dar sitio a todas estas novedades se aumentará la altura del coliseo en doce metros . La cubierta retráctil eliminará el impacto acústico de los ochenta mil aficionados.

Florentino Pérez y Manuela Carmena elogiaron el acuerdo y el comienzo de los trabajos. La obra ha sido planificada por el grupo arquitectónico alemán GMP, apoyado por L35-Ribas, que ganaron el concurso internacional para esta actuación.

Un vídeo con la historia de todos los campos en los que jugó el Real Madrid y la música de «Vincerò» introdujo a todos en el ambiente de lo que significó crear el Bernabéu en los años cuarenta, en un descampado de Madrid, gracias a la idea futurista del loco más cuerdo de la historia del Real Madrid, Santiago Bernabéu, que primero puso el teatro y luego lo llenó de sueños hechos realidad con Di Stéfano como primer artífice de la leyenda y Gento como brazo izquierdo ejecutor.

Florentino Pérez analizó el nuevo proyecto: «Este es el lugar donde los madridistas nos unimos a un sentimiento que nació hace 117 años. Este es un club que pertenece a los madridistas de Madrid y de todo el mundo. Este acto supone el punto definitivo para comenzar un hito arquitectónico, el nuevo Bernabéu, que será una gran obra también para la ciudad de Madrid. A lo largo de este siglo hemos invertido 256 millones en el estadio y 231 en la Ciudad Real Madrid. Tras la sentencia que frenó la reforma en 2015, no nos amilanamos y nos pusimos manos a la obra. Hoy, todo está preparado para acometer este gran reto. La semana próxima tendremos acabada la financiación y las obras comenzarán nada más acabar la temporada. Será el nuevo estadio digital del futuro. Este campo cumplirá en diciembre 72 años. Aquí están las veintitrés Copas de Europa, las trece de fútbol y las diez de baloncesto. Querida alcaldesa, quiero que sepas que estamos orgullosos de llevar el nombre de Madrid por el mundo y que con ese nombre, el Real Madrid no tiene fronteras».

Manuela Carmena habló de sus políticas y su aplicación: «Cuando contemplaba el primero de los vídeos sentía ese placer de ver lo que es el fútbol, los niños riendo, la pasión. Hemos conseguido que los grandes deportes y especialmente el fútbol sean los que movilizan a la población. En Madrid tenemos dos grandes equipos, el Real Madrid y el Atlético de Madrid, especialmente el Real Madrid, la casa donde hoy estamos, pero también pienso en el Rayo. Tenemos que ayudar a los tres equipos madrileños. Valoro también el baloncesto y la irrupción del fútbol femenino y del deporte femenino en general. Nosotros hemos optado por el urbanismo de consenso. Cuando intercambiaba unas palabras con Florentino hablábamos de la dificultad de hacer este tipo de obras en las grandes ciudades. Ha sido un calvario, pero la obra está aprobada. Hay que destacar que todo el ajardinamiento será a costa del Real Madrid».

Una plaza con un gran jardín crecerá en la antigua Esquina del Bernabéu, centro comercial que ya ha sido cerrado y que se encuentra en demolición. La calle de Rafael Salgado, el hombre que ayudó a financiar a Bernabéu aquella primera locura con sus contactos bancarios, será peatonal. El estadio será otro, muy distinto, un centro de reunión. Pero el fútbol será el mismo.