Aleksander Pisarev, luchador de artes marciales mixtas ruso, ha muerto este fin de semana a los 33 años, en circunstancias aún no esclarecidas. Según la agencia TASS, el púgil murió en su domicilio de Moscú mientras dormía.
Las primeras sospechas apuntan a un envenenamiento ... en una sandía, ya que su esposa, que se encuentra hospitalizada, también comió esta fruta. Las informaciones de la citada agencia de noticias solo apuntan a que «no tenía ningún problema de salud crónico y que la muerte se produjo »por una intoxicación alimentaria«, pero las autoridades están investigando lo sucedido.
Pisarev era uno de los luchadores más pujantes de la lucha rusa. Ganó tres de los cinco cinco combates como profesional en las AMM, fue finalista en los campeonatos de Europa de MMA y empezaba a estar en los círculos cercanos del principal promotor de este deporte, la UFC.
Los dos últimos años había estado fuera de competición, mientras se preparaba para regresar al octógono en breve. Su última derrota, en febrero de 2020, se produjo en Ekaterimburgo contra el también ruso Maxim Usoyan.
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