Bronce para Saúl Craviotto

Mientras los demás participantes saludaban al paso de la cámara, Craviotto se mantuvo firme, serio, concentrado, embutido en sus gafas de sol, visualizando una carrera, su final en el K1 200 y un metal que quería hacer suyo. La calle siete iba a ser su camino hacia otro podio.

Casi sin respirar se ven las carreras de Craviotto, pues apenas da tiempo a ver sus paladas. Menos aún se pudieron contar las del británico Liam Heath y el francés Maxime Beaumont , que impusieron un ritmo vertiginoso desde el principio. Demasiado para las aspiraciones de Craviotto que no se acababa de despegar de los últimos puestos.

Sin embargo, Craviotto no hbía dicho la última palabra y arremetió con fuerza su pala en el agua en los ultimísimos metros para atrapar un bronce que tuvo que dilucidarse en la sala de tiempos con los jueces porque en directo no se podía comprobar si fue tercero el español o el alemán Ronald Rauhe. Al final, el cronómetro tomó una decisión salomónica: ambos llegaron con el mismo tiempo (35.662), por lo que compartirían bronce y espacio en el podio .

Poco le importó a Craviotto, que se abrazó con el alemán, contentísimo por este nuevo éxito en su carrera. Un bronce para sumar al historial, a su vida, a su piragua, y al medallero español. Y ya ha aportado cuatro. En tres Juegos Olímpicos.

14.12

Hsta aquí la participación de Craviotto. En apenas una hora, la final del K4 1.000 metros con más participación española.

14.11

Habrá bronce compartido con Rauhe, que han acabado con el mismo tiempo. ¡Increíble!

14.10

Es la segunda medalla del español tras el oro en K2 200 metros con Toro.

14.09

Tuvo una mala salida Craviotto, pero consiguió alcanzar a los primeros en los últimos metros. Al final, la foto finish le dio el tercer puesto al español por delante del alemán Rauhe.

14.08

¡Craviotto es bronce! La remontada del español le ha valido un metal cuando todo parecía perdido... ¡Enorme el español!

14.08

El final ha sido de foto finish, con oro para el británico Heath, el francés Beaumont segundo...

14.08

Se está quedando muy atrás...

14.07

¡Empieza la prueba! Algo atrás el español...

14.05

Craviotto estará en la calle número siete.

14.04

Es fundamental para las opciones españolas que no sople mucho viento, aunque por cómo se mueve el agua parece que sí lo hace...

14.02

El policía puede convertirse en el segundo deportista español que sume dos medallas en Río 2016 después de las de Mireia Belmonte en la piscina.

13.59

Menos de diez minutos para que comience la final y Craviotto luche por la duodécima medalla de la delegación española en estos Juegos Olímpicos. Ya están en la mochila 6 oros, 2 platas y 3 bronces.

13.42

Estos serán sus rivales en la final.

13.40

Saúl Craviotto , campeón olímpico ya en estos juegos junto a Cristian Toro en la prueba de piragüismo de K2 200 metros, tiene la posibilidad de ganar su segundo metal en solitario, en la prueba individual de la misma distancia.

13.38

¡Buenos días! Acaba de comenzar la jornada y en apenas media hora, a las 14.07 hora española, tenemos la primera posibilidad de medalla para nuestra delegación.

El ciclo olímpico de Saúl Craviotto no ha sido sencillo. Lo reconocía después de proclamarse campeón olímpico en K2 junto a Toro , al tiempo que apuntaba a su familia como uno de los factores clave para la recuperación a marchas forzadas. Doce meses de trabajo intenso que le han llevado de estar fuera de los Juegos a ganar un nuevo oro y luchar por otro más hoy en K1 200.

Además de las largas jornadas de paladas en el embalse de Trasona, el secreto de Craviotto ha estado en su cocina. El catalán comenzó el pasado verano una transformación en su alimentación siguiendo los consejos de su mujer Celia , aficionada a la nutrición. Desayunos menos copiosos pero más cargados de energía, nuevos ingredientes en la comida y combinación de frutas y hortalizas para acelerar la recuperación. Un cambio necesario para hacer frente al paso del tiempo y alargar su carrera. Cuidar más el cuerpo. «Hace un año que decidimos cambiar nuestra forma de comer de manera más habitual. Fue cuando nos lo tomamos más en serio y fue creciendo una afición por la nutrición que compartimos. Está claro que no es que haya ganado por esto, pero todo ayuda», relata Celia a ABC.

El cambio empezó como un juego. Innovando para hacer las comidas más divertidas y evitar la monotonía, pero al mismo tiempo dando un empujón a la piragua desde los fogones. «Quizá lo más relevante en ese sentido haya sido el desayuno, algo que hemos cuidado con especial atención. Saúl antes era de tomarse un café con una tostada y ahora estudiamos qué tipo de entrenamiento va a tener ese día y en función de eso preparamos una u otra cosa. Avena, leche, plátano, batidos de frutas y una tortilla de un huevo puede ser un ejemplo del nuevo inicio de día para Saúl», afirma la precursora de ese nuevo rumbo del deportista.

Saúl entrena alrededor de cinco horas al día tras las que necesita una recuperación lo más rápida posible. Por eso, los batidos se han convertido en una parte esencial de su dieta. «Con lo que más disfruta es con los batidos de frutas. Su preferido es el de naranja, fresas frambuesas congeladas y plátano... Le viene muy bien cuando tiene las defensas muy bajas, porque este batido tiene vitamina C y antioxidantes y así no se me pone malo», bromea.

El cuerpo de Craviotto necesita mucha gasolina. Casi cien kilos de músculo que rellenar de energía, aunque el catalán no es caprichoso. «Como le gusta todo, podemos arriesgar. Por lo único que me echa la bronca es porque no repito casi nunca. Intento subir cosas nuevas -Celia publica todas sus recetas en «Thefitbowl» , su cuenta en Instagram , Twitter y Facebook - y él me riñe porque hay veces que hacemos algo que le gusta mucho y no lo volvemos a hacer. Por ejemplo, una receta de salmón con soja y zumo de naranja que siempre me dice que tenemos que cocinar de nuevo», recuerda divertida.

En Río, Saúl no está teniendo la ayuda de su mujer. Durante los Juegos, tiene que conformarse con el buffet del restaurante. Tanto ella como su hija se han quedado en Asturias para «absorber los nervios y que esté tranquilo». Cuando vuelva a Asturias, Celia tiene claro que habrá que dar un poco de rienda suelta a la imaginación.

«En Londres, después de la medalla, Sete Benavides y él se fueron a restaurante de comida rápida y se pusieron hasta arriba de hamburguesas », señala, aunque cree que esta vez será diferente. «Yo creo que ya estará pensando en unos caracoles de su madre o una buena fabada». Pequeños placeres que el campeón se da de vez en cuando. Aunque lo que realmente desea, como reconocía tras su oro en el K2, es regresar para abrazar a su mujer y su hija.