Medina Cantalejo, jefe de los árbitros, responde al Madrid: «Podemos ser torpes, muy malos... pero corruptos no»

El mandamás de los árbitros españoles se ha mostrado contundente en el espacio 'El Cafelito', del programa 'El chiringuito de jugones', conducido por el periodista Josep Pedrerol, del que se ha conocido un adelanto antes de su emisión el jueves, y donde ha llegado a afirmar que los colegiados «podemos ser muy malos, pero corruptos no».

Durante la entrevista, la cabeza visible del estamento arbitral se refirió a la guerra que ha abierto el Real Madrid contra el actual sistema de arbitraje, que considera «viciado», «corrompido» y «fraudulento», a través de una carta en la que reclama su «reforma estructural».

«Nosotros no entramos en dialécticas con equipos. Siempre que ha sido con respeto, nosotros abrimos nuestras puertas. No quiero ser yo alguien que meta más gasolina al fuego», explicó sobre la denuncia blanca.

Sobre la posible corrupción del sistema, Medina Cantalejo se muestra tajante: «No lo comparto. No he vivido eso. Porque alguien, que tiene que salir la resolución judicial, haya cometido un delito, el resto de generaciones anteriores y posteriores no tenemos culpa de eso. Yo no me tengo que avergonzar de nada».

«Ni yo ni mis compañeros son nada corruptos. Podemos ser muy torpes, muy malos, pero corruptos te aseguro que no. Llevo mal que digan que mi organización está corrompida. Otra cosa es que yo tenga que sacar todos los días los pies a pasear y trabajar con eso que nos cae encima, porque no nos queda otra, la competición sigue. No hay un ser humano que lo lleve bien», agrega.

Según el presidente del CTA, «los árbitros no van a perjudicar a nadie. En absoluto. Ten la plena seguridad de que son honrados, a pesar de comunicados, cartas, de acciones, de televisiones… ningún árbitro va a un campo con la intención de hacerle daño a nadie».

Sin embargo, Medina Cantalejo es crítico con la resolución de la acción de Romero sobre Mbappé en Cornellá-El Prat el pasado fin de semana. «Lo que todo el mundo del fútbol ve, no pueden dejar de verlo un árbitro de campo y de VAR. Tenemos que proteger a los jugadores. Está muy claro lo que ha pasado. Cuando yo veo algo que es de blanco o negro y la decisión obvia es blanco y el árbitro opta por negro, en esas decisiones yo no puedo darte un argumento o una explicación».

La incomprensión de Medina Cantalejo acerca de esta jugada y algunas otras ha desembocado en que la próxima jornada de la Liga sean ocho los árbitros que no pitarán, castigados. «Esta jornada son ocho los árbitros que van a la nevera», confirmó el directivo.

Sobre la petición del Real Madrid de poder escuchar los audios entre el colegiado del Espanyol-Real Madrid, Muñiz Ruiz y la sala VOR, para tratar de entender la decisión del árbitro, Medina Cantalejo explicó la posición del CTA al respecto.

«Cualquier equipo que lo solicite con respeto puede ir a nuestros vestuarios y allí nos vemos. Si el Madrid pide ahora los audios es una situación complicada. Cuando se pacifique la situación no tenemos ningún inconveniente de que cualquier equipo vaya con respeto a hablar con nosotros. Ahora están las aguas tan movidas que lo mejor para todos es calmarnos y si en algún momento podemos sentarnos a hablar… Hay que estudiar la situación. Han mandado un documento con muchas situaciones y tenemos que analizarla. Cualquier equipo que venga con respeto a nuestra casa tiene las puertas abiertas».

Finalmente, cuestionado por el caso Negreira y su influencia en la situación actual de desconfianza hacia los arbitrajes, el jefe de los colegiados reconoció que para ellos «ha sido terrible por lo que hemos pasado y es terrible por lo que estamos pasando».

«Pase lo que pase, la huella y la mancha que tendrá el arbitraje español será imborrable. Aunque luego salga indemne judicialmente, la mancha social y deportiva quedará durante mucho tiempo», agregó, antes de volver a desmarcarse de Enríquez Negreira. «Negreira era un vicepresidente con el que teníamos una relación prácticamente nula. Él llegaba allí y estaba con el presidente. No tenía cometido. Mi ascenso me lo comunicó Victoriano Sánchez Arminio. Él llamaba a los árbitros para decirle que habían subido, pero por orden del presidente».

«A mí no me tiene que limpiar nadie porque no tengo ningún tipo de rémoras, ningún tipo de causa ni ningún tipo de nada», quiso zanjar un asunto que parece mas bien muy lejos de su final.