Una Supercopa marcada por un físico deficiente

Así que huele a salida en tromba del Madrid para comerse por los pies al Barça. No obstante, podría ser un error de cálculo porque, es sabido, el Madrid no está para aguantar noventa minutos a una presión máxima. De hecho, no está ni para hacerlo media hora. Es pues un problema grave.

En esta coyuntura, Mourinho se encuentra ante un dilema : enfrentarse al Barça requiere hacerle una presión hasta las últimas consecuencias para no dejarle ni la posesión del balón ni que maneje sin impedimento en el medio campo hasta que encuentre la diagonal mortal de Messi . La otra opción es la de dosificarse en el partido y no salir a tontas y a locas. Esperar en el medio campo propio y realizar la presión en esos veinte metros (lejos de Casillas ) para intentar robar el balón y salir a la contra, donde el Real es verdaderamente letal. Aunque el Bernabéu ruja y pida guerra, exija ir a por el Barça hasta enterrarlos en el mar (Manzanares), es más que dudoso que Mou ordene carga a la bayoneta.

Además, es de los que busca un cuarto de excusa para no salir a campo abierto, y menos con el Barcelona. Mou tomó nota del segundo tiempo del Camp Nou . El Madrid marcó y aunque empató enseguida el Barça, los blancos se vieron con posibilidades de ir a degüello. En cuanto adelantaron las líneas el Barça les pilló con facilidad encontrando huecos donde antes solo había ladrillos y altas montañas.

Así que lo más probable es que el Madrid nade y guarde la ropa aunque será fácil perder la cabeza y dejarse llevar por el empuje del Bernabéu.

El Madrid tiene dos ventajas: que va a jugar Pepe , lo que es una mínima garantía de que Messi será menos efectivo (aunque nunca hay seguridad al respecto). Además, podrá adelantar la línea de presión unos metros. Jugar con Pepe y Ramos en el centro de la defensa conlleva la posibilidad de ajustar más dicha presión porque, en caso de ser superada, son los suficientemente rápidos para recular y recuperar posiciones. El segundo punto a favor es que con el 1-0 y el 2-1 le vale , así que puede jugar con el resultado y actuar en consecuencia.

No obstante, el Barcelona también tiene sus armas. Aunque tampoco está para tirar cohetes en el aspecto físico (se vio en Pamplona) está ligeramente mejor que el Madrid . Un estudio detenido de las alineaciones del Camp Nou desvela que el Madrid alineó a diez jugadores que estuvieron en la Eurocopa o en los Juegos Olímpicos. El Barcelona alineó cinco, así que tuvo más frescura y chispa física.

La otra ventaja azulgrana es Messi. Cuando el Madrid no está bien a nivel colectivo suele tener a Cristiano Ronaldo , pero este no está todavía y aunque marcara en la ida se le ve que aún le falta para estar en plena forma. Sin embargo, Messi está mejor. Como no necesita tanto del físico como su oponente, con poco le basta. Además, ha tenido vacaciones. No es pecata minuta.