El Celta no se encuentra desde la marcha de Berizzo

Desde aquel día, en Vigo aún no han sabido hallar la estabilidad que encontraron en el argentino. Antes del final de esa misma temporada, equipo y entrenador no alcanzaron la renovación, y Berizzo se marchó al Sevilla. Desde entonces, el Celta ha acumulado cinco técnicos en tres temporadas . Unzué, Mohamed, Cardoso, Escribá y García, renovado en verano, conforman la lista, este último despedido el lunes tras un mal arranque de temporada , donde el equipo solo ha ganado un partido en nueve jornadas y es el segundo equipo más goleado de la competición, mientras el temido descenso se acerca por tercera temporada consecutiva. El año pasado, los vigueses se salvaron en la última jornada gracias un empate contra el Español y la igualada entre Leganés y Real Madrid, que ya era campeón de Liga. Hace dos, fue el último equipo de Primera en la clasificación, con algo más de holgura eso sí, al tener cuatro puntos más que el Girona.

La afición, con los matices y versiones que defienden sus diferentes segmentos, transpira un descontento generalizado. «Este año hablamos poco del Celta», reconocen en la ciudad. Además, no solo García acumula las críticas, sino que la junta directiva liderada por Carlos Mouriño empieza a ser cuestionada con contundencia, sobre todo en el apartado de fichajes. El equipo solo ha ejecutado la compra de Miguel Baeza del Castilla por la misma cantidad que vendieron a Pione Sisto al Midtjylland , dos millones y medio. También llegaron Tapia y Vadillo como agentes libres. Pese a que la pandemia ha caducado todos los códigos del mercado, impidiendo a los equipos a hacer grandes desembolsos, en Vigo siempre se ha priorizado la salud de sus cuentas antes que grandes inversiones en jugadores, aunque eso sí, es de los pocos equipos que no tienen deuda neta de toda la competición. «Necesitamos desde hace tiempo un lavado de cara», se lamentan en el sur de Galicia.

Las turbulencias han sido constantes desde el inicio de la temporada. Hugo Mallo, procedente de las categorías inferiores del Celta y que había sido capitán de forma asidua desde 2016, cedió el brazalete por orden de Oscar García , pese a que había sido reelegido por sus compañeros este mismo verano. También se cayeron de la lista los porteros Rubén Blanco y Sergio Álvarez, criados como canteranos en A Madroa, lo que ha dejado a Iago Aspas, gran emblema del club , como único gallego en la capitanía. El técnico catalán había revelado que Mallo pidió irse del club en el último mercado de fichajes, una declaración que no sentó bien en el entorno del jugador. Además, ante las lesiones de los dos porteros (Blanco lo estaba desde julio y Álvarez desde mayo) el club no adquirió ningún parche, lo que dejó a Iván Villar, que estrenaba ficha del primer equipo este año, como portero titular hasta la sexta jornada.

Ante la incertidumbre, parece que el argentino «Chacho» Coudet , que estuvo hasta la pasada temporada en el Internacional brasileño, será el relevo de García para esta temporada. Mientras, el Celta, se resguarda en aquella noche de Manchester, o al menos en lo que significó, porque todo tiempo pasado fue mejor.