Para conocer mejor esa curva, de la que tanto se ha hablado y escrito a lo largo de los años, los responsables de la F1 han colocado una cámara en el cockpit de Fernando Alonso y han mostrado cómo es una vuelta al trazado belga a lomos del Alpine.
Una sensación única, no vivida nunca antes, que ha acercado a los aficionados a la peligrosidad que se vive al montarse en un monoplaza de Fórmula 1. En las imágenes, además del vertiginoso paso por Eau-Rouge , puede verse cómo el español controla varios latigazos de su coche para no salirse de la trazada.
Alonso, que hace unas horas firmaba su renovación con Alpine para 2022, acabó cuarto en los segundos libres, dominados por un Verstappen que terminó desencadenando una bandera roja al estrella su Red Bull en los últimos minutos de la sesión.
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