La fiscal sostiene que, además, ambas acusaciones reclaman ahora, en apelación, que la pena sea aún mayor. Nueve, en el caso del Ministerio público, y doce, en el de la acusación particular. Insiste también en que «existe un elevado riesgo de fuga», que entiende que no puede mitigarse con las medidas que ahora ha acordado el tribunal de la Sección 21, la retirada de ambos pasaportes; español y brasileño, así como comparecencias semanales ante el jugado.
Por eso pide que el brasileño permanezca en prisión hasta cumplir la mitad de la pena, esto es, dos años y tres meses, cuando ahora lleva ya 14 meses, desde el 20 de enero. El recurso de súplica sostiene asimismo que Alves no tiene arraigo en España -pese a que está empadronado en su casa de Esplugues (Barcelona)- y que Brasil no «no extradita nacionales en delitos de agresión sexual». Además, la Fiscalía sostiene que «vista su elevada capacidad económica así como la de su entorno», es posible huida no queda mitigada, pese a imponer la Audiencia una fianza de un millón de euros, para que el ex lateral del Barça pueda salir de prisión.
Cabe recordar que Alves pasará, al menos, hasta el lunes en el penal de Brians 2, ya que su defensa no ha conseguido aún consignar el dinero en la cuenta del juzgado. Por lo que, al no haberlo hecho a las 15.00 horas de este viernes, el fin de semana, aunque lo haga, tendrá que esperar.
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