Alonso no renuncia

Puede que en el trazado de Yeongam, Sebastian Vettel no escuche la música de viento con la que el público le ha despedido después de ganar los últimos tres grandes premios, Bélgica, Italia y Singapur. Abucheos para el triple campeón mundial y cansancio de la gente por ver siempre al mismo en la punta del escalafón. Frente a ese desafecto y a las ganas de la parroquia por la variedad, Vettel no se inmuta.

Durante esta semana, Giancarlo Minardi , ex propietario de un equipo de F1 y ex jefe de Alonso, insinuó que el sonido del Red Bull en Singapur podría indicar el uso de un sistema de tracción que está prohibido. El español secundó la idea: "Es algo diferente, pero es legal". Y Vettel se creció en la respuesta cuando ayer le preguntaron. "Como todo el mundo vio, el sistema funcionó en Singapur. Estoy seguro de que, de cara a las próximas carreras, podremos desarrollar el sistema aún más y conseguir mayores beneficios".

Solo Vettel y Alonso, separados por 60 puntos en la clasificación a falta de seis carreras para el cierre del Mundial , han vencido en Corea desde que el circuito se incluyó en el calendario en 2010. El asturiano necesita un golpe de fatalidad de Vettel y toda la suerte de su parte para mantener con vida un certamen que agoniza por la falta de emoción.

Y Alonso parece ser el único que cree en lo imposible. Lo expuso de una forma gráfica. "El presidente (de Ferrari) y yo pensamos que todavía puede suceder cualquier cosa. Como en la Copa América, vimos que un equipo perdía 1-8 y al final ganó 9-8. Sabemos que es difícil, pero si tenemos suerte en un par de carreras las cosas pueden cambiar. Pero necesitamos suerte y lo sabemos. No nos rendiremos hasta que no sea matemáticamente imposible".

Algo así como el goleador a la caza del fallo del portero, del rechace salvador y de una diana en el último minuto. " Pero si Vettel no comete fallos, tiene el título en el bolsillo ". Hasta la fecha, el alemán apenas ha deslizado errores en su trayectoria impecable de 2013.

"Siempre tienes la esperanza. Hasta que matemáticamente sea imposible siempre piensas que algo puede pasar y tenemos que hacer lo máximo, aunque está realmente complicado y la lógica dice que no va a ser posible. Debemos hacer buenas careras, intentar sacar lo máximo y necesitamos fallos por parte de ellos, si no tienen el título en el bolsillo", abundó el español.

Solo hay una cuestión segura en Yeongam. Mark Webber saldrá por detrás del español a no ser que suceda una tragedia en la clasificación del sábado por parte de Ferrari. El australiano fue sancionado con diez puestos en la parrilla por recoger el taxi que le ofreció Alonso en Singapur al terminar la prueba. Uno menos que tendrá que adelantar el ovetense en Corea del Sur. "Esperamos ser un poco más rápidos aquí, sabiendo que seguramente no lucharemos de tú a tú con Red Bull. Ojalá el domingo podamos hacer una buena salida, una buena estrategia e intentar pelear. De aquí a final de año vamos a tener las mismas sensaciones, sabiendo que no vamos a ir tan rápido como ellos. No nos queda otra que luchar hasta la última vuelta a tope", dijo Alonso.