Las conversaciones públicas de los árbitros llegan también al fútbol sala: «¡Te la ha salvado, iba para dentro!»

Después de que la pasada campaña se convirtiese en una auténtica odisea para los aficionados a este deporte poder disfrutar de un partido de fútbol sala en directo y con la calidad suficiente por televisión, el trabajo de la RFEF, que sigue manteniendo el control de la competiciones, comienza a dar sus frutos.

Recientemente la ronda de octavos de final de la Copa el Rey pudo verse al completo en Youtube, y un poco antes, en la Supercopa de España que brillantemente se adjudicó el Jimbee Cartagena, la RFEF hizo públicos los audios de los árbitros durante la final. Novedades que hacen soñar a los aficionados con una nueva etapa de crecimiento para el futsal.

La última de estas novedades, compartida por la Federación en las redes sociales, emula lo que sucede ya en otros deportes y otros torneos como el baloncesto, donde la ACB lleva tiempo enseñando estas conversaciones de los árbitros durante los encuentros para regocijo de los espectadores.

Este viernes la RFEF compartió los audios de los colegiados David Urdanoz y Aitor Felipe Madorrán, encargados de pitar la final de la Supercopa de España entre el Barcelona y el Jimbee Cartagena. En los mismos se les puede ver dialogar con los jugadores para rebajar la tensión, ayudarles en momentos complicados como golpes o lesiones, e incluso bromear con ellos con cierta sorna, como cuando ante las protestas por un córner de Chemi, portero cartagenero, David Urdanoz le espeta: «Ha sido el defensor. ¡Te la ha salvado, iba para dentro!».

Entre otras escenas que ha compartido la RFEF, también resulta llamativo cómo su compañero ese día en la final de la Supercopa, Aitor Felipe Madorrán, frena de forma contundente el pique entre el pívot brasileño del Barça Pito y el cierre del Jimbee Bebe. «¡No quiero ninguna chorrada entre los dos!».

Una imagen que, sin duda y como ya venía haciendo en el baloncesto en España y otros deportes fuera del país, contribuye a enseñar mejor y normalizar la labor de los árbitros durante los partidos, acercándolos mucho más al aficionado. Y además generando una nueva fuente de espectáculo, pues en ocasiones las conversaciones entre los diferentes protagonistas de los encuentros aportan nuevos detalles que de otra forma pasarían desapercibidos.

Contrasta con estas iniciativas el inmovilismo del fútbol, que sólo recientemente se ha atrevido a compartir las conversaciones entre el árbitro y el VAR en las decisiones que necesitan del monitor a pie de campo, pero de momento se resiste a mostrar en partidos oficiales los intercambios de palabras entre los futbolistas y los jueces del encuentro.