baloncesto
España libra el susto contra Australia
La selección de Scariolo sólo pudo respirar con un parcial de 15-0 en el último cuarto
andrés aragón
La selección española resolvió con más aprietos de los que indica el marcador final (75-69) su compromiso con Australia , quinto partido de la fase preparatoria para Londres 2012. Un parcial de 15-0 en el último cuarto, comandado por un ... Sergio Rodríguez pletórico, decantó la victoria del lado de una España que caminó a hombros de Pau Gasol . [Así hemos narrado el partido]
El cuadro de Sergio Scariolo dejó entrever pronto el diagnóstico: grandes acciones del de Sant Boi en ataque intercaladas con jugadas de poca tensión en defensa. Que el pívot calibra en sus manos buena parte de las opciones de la selección es algo normal en un jugador de su magnitud. Que el suyo sea recurso casi único, una noticia preocupante cuando sólo quedan diez días para el comienzo de los Juegos.
Faltó su hermano Marc , cuyos problemas de hombro son motivo de nerviosismo, pero su peso fue desmedido. El jugador de los Lakers acaparó las opciones ofensivas de España desde el comienzo. No sólo en anotación (22 puntos), donde encuentra pocos rivales a su altura en el baloncesto internacional, sino también a la hora de facilitar la producción a sus compañeros. Con Calderón algo gris, Pau fue el socio que más agradeció Felipe Reyes .
Esa sobresaliente producción del mayor de los Gasol maquilló problemas que reclamarán revisión. Como los problemas en la transición ofensiva, demasiado lenta, o los ajustes en defensa, donde el conjunto «aussie» encontró con frecuencia posiciones cómodas de tiro.
Le tocó sufrir a la selección española, que sólo reaccionó con los manotazos de Sergio Rodríguez . El base canario proclamó la revolución en el último cuarto y facilitó un parcial de 15-0 que trajo tranquilidad para los hombres de Scariolo. Era su marcha de más la que necesitaba el combinado nacional para despertar y la que tanto agradeció el equipo.
Australia, que será rival de España en la fase de grupos, no maneja ni entre sus previsiones más optimistas una medalla, pero tiene armas suficientes para ser un rival correoso. El suyo es un aviso que la selección debe tener en cuenta. La primera oportunidad para remendarlo llega en 24 horas.
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