Polémica también por los diseños de Stella McCartney para el equipo británico

Elegante y contemporáneo –además de digno–, el resultado no fue, aún así, el esperado para muchos. La diseñadora, fichada como directora creativa por Adidas, se ha basado en una deconstrucción de la enseña británica para realizar los distintos uniformes. «Para mí es una de las banderas más bonitas del mundo , y es importante para mí permanecer fiel a ese diseño icónico, pero también modernizarlo y presentarlo en una forma más moderna», explicaba McCartney durante la presentación de la equipación del «Team Britain» a finales de marzo.

Esa adaptación de la bandera británica le ha llevado a reducir la presencia del color rojo en detrimento del más sobrio. El rojo sobre fondo blanco representa la cruz de San Jorge, elemento identitario irrenunciable de Inglaterra. «¿Por qué nos hemos convertido de repente en escoceses?», se quejaron varios usuarios de Twitter, en referencia al azul, predominante en la enseña escocesa (formada con la cruz blanca de San Andrés sobre fondo azul).

El campeón olímpico de ciclismo, Bradley Wiggins, exclamó en la red social: «¡Oh dear! El kit olímpico». Twitter, como ha ocurrido en España , sirvió de canal de expresión de las opiniones críticas. Pero los contratos de patrocinio las acallaron rápidamente. El propio Wiggins, esponsorizado en su día por Adidas, retiró su comentario poco después. En la prensa, los especialistas coincidían en que la «Union Jack azul» haría las delicias del tenista escocés Andy Murray.

Un segundo foco de críticas provino del ámbito de la psicología deportiva, donde la literatura parece coincidir en que existe una correlación entre el rojo en la vestimenta y la victoria en la competición. «Obviamente [McCartney] lo ha diseñado desde el punto de vista de la moda, sin tener en cuenta los efectos potenciales que podría tener sobre el rendimiento», denunciaba el psicólogo Robert Barton en « The Guardian ». «Es un error», sentenciaba el autor de uno de los informes de referencia en la materia.

Pero muchos otros atletas aplaudieron los diseños de McCartney y, en todo caso, la polémica no alcanzó en ningún momento las proporciones del caso español. «Me gusta, tiene trozos sutiles de rojo, y el color destaca más cuando tienes pequeñas manchas sutiles», dijo durante la presentación Jessica Ennis, la campeona de heptatlón.

La equipación de Adidas incluye en total hasta 590 elementos del «kit» olímpico, fabricados en Portugal, Turquía, Asia y, en menor medida, en ciertos puntos del Reino Unido . Se estima que la marca fabricará 175.000 piezas de vestuario para los 900 deportistas británicos, que competirán en 26 deportes olímpicos y 20 modalidades paralímpicas.