Peraud aprieta el podio

La fuga tenía el aliciente de la lucha por el maillot de la montaña, en una de las ediciones con más piques por el jersey de pepas rojas de los últimos tiempos. Rafal Majka se lo robó ayer a Purito y hoy Rodríguez, aprovechando que los dos estaban en la fuga, estaba empeñado en recuperarlo tras cada paso. El español le ganó los sprints en cada puerto de paso, Portillon, Peyresourde y Val Louron. Pero parecía que Majka no ponía todo el empeño en aquellas batallas. Algo se guardaba.

Entre las dos primeras subidas se escapó de la fuga Vasil Kiryienka, un ciclista robótico de la escuela soviética al que solo le gusta correr solo. El bielorruso, ahora en el equipo Sky tras salir con una imagen mejorable de Movistar, tenía todo el aspecto de zamparse en cabeza y en solitario las subidas hasta Saint-Lary; llegó a tener dos minutos largos con sus compañeros de fuga. Sin embargo, Val Louron-Azet le destrozó las piernas y el resto de la escapada le capturó.

El resto de la escapada era muy buena: además de Purito y Majka, Fränk Schleck, Jesús Herrada, Ion Izagirre, Pierre Rolland, Bauke Mollema... Llegaron al pie de Saint-Lary sin más que dos minutos de ventaja porque el pelotón afiló las ruedas: primero el Fdj.fr de Pinot y después el Ag2r de Peraud y Bardet pusieron un ritmo que redujo el grupo a la decena de unidades. [ Clasificación general del Tour de Francia ]

Coronaron Val Louron-Azet y Pinot hizo de Pinot: atacó en los últimos metros para afrontar la bajada con calma. Esta vez Bardet le leyó las cartas y decidió tirarse abajo con más fuerza, así que se fue del grupo de favoritos. Empezó Saint-Lary medio minuto por delante, a la vez que Giovanni Visconti (Movistar) se desmarcaba en la cabeza. Pinot colocó a su escudero Jeanneson a tirar, en amenaza de oto ataque francés.

El hachazo local llegó pero por el otro lado. A Pinot se le cruzó Pla d'Adet, Nibali soltó lastre y solo Jean-Christophe Peraud, el candidato al podio de 37 años, le siguió. ¿El gran damnificado? Alejandro Valverde, descolgado de todos, también de Pinot, Bardet y Van Garderen, en cuanto el ritmo se tensó. Al Movistar se le torció la etapa en tres minutos, los que pasaron desde que a Valverde se le escapaba el podio hasta que Majka cogió a Visconti en la cabeza.

El mismo ciclista que no pudo con Purito en los sprints de los anteriores tres puertos dio una lección subiendo a Saint-Lary. En la última subida, Majka soltó a Purito como un peso muerto, fue mermando la ventaja de Visconti, le agarró y le remató. Entre tanto se aupó con la antena de una moto, le guiñó un ojo a la cámara y se quedó el maillot de la montaña mientras ganaba su segunda etapa de este Tour. Majka fue un espectáculo: es el heredero valiente de Zenon Jaskula.

Al Movistar se le fue la etapa pero no el Tour. Herrada e Izagirre, en la fuga, se dejaron caer para ayudar a Valverde. Aunque a ratos lo llevaban entre alfileres, Izagirre consiguió que el murciano contactase con Pinot, Bardet y Van Garderen –en meta, en un alarde muy valverdiano, les esprintó y les sacó tres segundos– y minimizase la pérdida con Peraud, la nueva amenaza. El veterano del Ag2r está ahora a 42 segundos, todavía cuarto (Pinot está tercero a 34”). A Valverde no el servirá su equipo en la contrarreloj del sábado, pero antes podrá comprobar mañana, en Hautacam, si a Peraud le puede la impresión de verse con 37 años y a un soplo del podio del Tour de Francia.