El Giro llega a la montaña tras la huella del «Tarangu»

Cuatro décadas después, la primera etapa de montaña de esta edición pasa por Monte Carpegna, donde ahora hay una escultura que homenajea a Marco Pantani –«El Pirata» era de la zona y utilizaba esta subida para entrenarse–. Los últimos 40 kilómetros de la etapa son un sube y baja constante: Carpegna (13,5 km. al 7,5%), Villaggio del Lago (7,5 km. al 6,4%) y el final en Montecopiolo (6,4 km. al 6,4%).

Michael Matthews saldrá de rosa hoy, aunque se espera que Cadel Evans sea quien vista la maglia al término de la etapa. A sus 37 años, entre la contrarreloj por equipos y la caída que sorteó en Montecassino, el australiano tiene al menos un minuto de ventaja con todos sus rivales.

Al principal, Nairo Quintana, gran favorito una vez que Joaquim Rodríguez abandonó en Montecassino, le saca ya 1:47 en la general sin haber tocado la montaña. Otro colombiano, Rigoberto Urán (segundo en el Giro 2013), está a 57 segundos de Evans; el polaco Majka, compañero de Contador ya pierde 1:04. Las circunstancias, por lo tanto, obligan a que haya ataques desde las primeras rampas de este Giro.

Pese a su edad, es solo la tercera vez que Evans participa en el Giro. En las dos ediciones anteriores se vistió con la maglia rosa. En 2010, en la tercera etapa y solo por un día (terminó quinto). En 2002, en sus inicios en la carretera, se puso líder a tres días del final; a los dos días sufrió una pájara terrible y no acabó ni entre los diez primeros de la general.

En el ocaso de su carrera, Evans puede tener la gran oportunidad de ganar el Giro, lo que sería su segunda vuelta grande tras el Tour 2011. Para ello tiene que empezar a confirmarlo en la etapa de hoy, recuerdo de «El Tarangu» y Pantani, dos grandes escaladores de siempre.