La estrella de fútbol americano que tiene miedo a los caballos

Elevados a la categoría de ídolos, protagonistas del mayor espectáculo deportivo de Estados Unidos, los gladiadores de la NFL también tienen sus puntos débiles. El talón de Aquiles de Eric Berry, «safety» de los Kansas City Chiefs, es la «equinofobia» : un miedo irracional a los caballos que también sufren Robert Pattinson y Kristen Stewart. La ironía de Berry es que tiene que convivir con un caballo, «Warpaint», mascota de los Kansas City Chiefs. El equipo instauró en 1963 la entrada de un caballo al campo cada vez que el equipo anotara un «touchdown». La tradición se perdió durante algún tiempo pero se recuperó en 2009, un año antes de la llegada de Berry, un joven prometedor que ya se ha convertido en una de las figuras de la defensa del equipo.

Sus compañeros explican que, cada vez que el caballo sale al campo, Berry no le quita el ojo. Los micrófonos captaron su miedo durante un partido de la pasada temporada que corrió como la pólvora por las redes sociales. « Oh, dios, ahí está ese caballo ... voy a esperar a que cruce. Tío.. yo no me meto en líos con los caballos. Podría venir aquí y soltar un relinche», se le puede escuchar.

Terapia de choque

Berry, nacido hace 24 años en Atlanta (Georgia), es el mejor «safety» de los Chiefs y uno de los más destacados de la liga, salvaje en los placajes a la línea ofensiva rival e inteligente para cortar pases de los quarterbacks, hasta el punto de haber sido seleccionado dos veces para la «Pro Bowl», el partido de las estrellas. Su equinofobia protagoniza un reportaje de la NFL en el que confiesa el origen de su miedo. «En los dibujos animados siempre retrataban a los caballos como personajes simpáticos, con colorines y hasta el arcoíris. Cuando me mordió no se parecía en nada a lo que había visto por televisión... pensé 'mierda caballo, confiaba en ti'», explica.

Ahora, Eric Berry intenta superar su miedo con terapia de choque. Ha colocado retratos de caballos en las paredes de su casa y tiene un pequeño muñeco de trapo que simula un equipo. Pequeñas ayudas antes de la prueba de fuego: acariciar a «Warpaint», la mascota del equipo. La experiencia salió bien, aunque Berry toavía parece reacio a acercarse más de la cuenta al caballo. «Paso a paso, Roma no se hizo en un día», sentencia.