Las figuras españolas se citan en Bogotá en defensa de la libertad y la Fiesta más universal

El acto, presidido por el maestro colombiano César Rincón, contó con el apoyo internacional de toreros españoles como El Juli, José María Manzanares, Juan José Padilla, Iván Fandiño Miguel Abellán, Alejandro Talavante, El Fandi, Curro Vásquez, Miguel Ángel Perera y Manuel Escribano y el francés Sebastián Castella. A ellos se juntaron, entre otros, los diestros mexicanos Héctor El Payo y Diego Silveti, y el colombiano Luis Bolívar.

Al grito de libertad o valientes, los centenares de aficionados que se agolpaban en un lateral de La Santamaría de la capital colombiana recibieron con una gran ovación a los toreros, ganaderos y empresarios taurinos que respaldaron esta protesta.

La manifestación por la reapertura de La Santamaría, cerrada desde que el alcalde bogotano, Gustavo Petro, prohibió las corridas en junio de 2012, reivindicó la libertad de la tauromaquia y reconoció los esfuerzos de los novilleros colombianos que ya completan 102 días de protesta con un plantón en las inmediaciones de la plaza.

«Es un atentado contra la libertad de los profesionales que vivimos de este oficio», dijo a Efe El Juli, quien consideró que por una «decisión política» no pueden ejercer su profesión en este coso taurino.

La Alcaldía revocó hace más de dos años el contrato de arrendamiento de La Santamaría a la Corporación Taurina de Bogotá alegando que los espacios públicos deben estar dedicados a "actividades de vida y no de muerte".

César Rincón, el torero colombiano por excelencia, dijo muy emocionado que el acto es «un momento histórico» y una celebración porque la Corte Constitucional «ya avala la tauromaquia como una expresión cultural».

La causa de los toreros recibió un impulso en septiembre pasado cuando la Corte Constitucional de Colombia ordenó el regreso de las corridas a la plaza al fallar una acción de tutela (recurso de amparo) en la que encontró "que no existe una norma legal que imponga la prohibición general de los espectáculos taurinos".

Según el tribunal, las autoridades de Bogotá deberán disponer lo necesario para la reanudación del espectáculo taurino en un plazo de seis meses y adoptar mecanismos contractuales y administrativos que garanticen la continuidad de la tauromaquia.

"Hoy se ha dado un gran ejemplo por el coraje de esos novilleros y por la unión de todas las figuras del toreo", dijo a periodistas el español José Mari Manzanares.

El torero, que recientemente sufrió la pérdida de su padre, el maestro José María Manzanares, que fue homenajeado con un minuto de silencio en el acto, quiso acompañar a la afición colombiana en su lucha aunque confesó que aún "no tiene fuerzas para ponerse delante de un toro".

Otro diestro español, Miguel Abellán, dijo a Efe que el cierre del coso capitalino es "una cuestión de libertad" que "no te puede negar ni privar nadie" y esperó que el alcalde "escuche a su pueblo" y a todos que reclaman el toreo.

El acto también con contó la lectura de un manifiesto a favor de la fiesta brava escrito por el periodista y crítico taurino colombiano Antonio Caballero, que fue firmado por las personalidades presentes.

Este texto es suscrito por voces relevantes entre los que destacan las figuras del nobel de Literatura de 2010 Mario Vargas Llosa, el cantautor español Joaquín Sabina y el pintor y escultor colombiano Fernando Botero.

Por su parte, los novilleros en protesta celebraron el apoyo internacional a su causa y la "unión de todos los estamentos de la fiesta brava", según dijo a Efe Andrés Castillo, quien al comienzo hizo una huelga de hambre de 40 días.

"Esos jóvenes han demostrado un valor y una pasión por nuestra cultura admirable", manifestó Juan José Padilla.

La creciente expectación de esta causa llevó a centenares de personalidades de la afición taurina española a celebrar una concentración paralela en Madrid como apoyo al toreo de Bogotá