Un retraso, una luz dañina y un ballet legendario
La Compañía Nacional de Danza estrena su nuevo espectáculo, 'NumEros', en el Teatro de la Zarzuela, y recupera 'Serenade', de Balanchine
Muriel Romero: «La pugna entre ballet clásico y danza contemporánea ya es algo pasado»
Madrid
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónMuriel Romero entra en la gran sala de ensayos de la Compañía Nacional de Danza, una espaciosa nave de techos altos que, hasta el último tercio del siglo pasado, fue establo para el ganado vacuno en las instalaciones del Matadero de Madrid; donde ... antes había corrales y abrevaderos, hoy hay grandes espejos y barras de ballet. Por la sala, los bailarines caminan, charlan, marcan pasos y movimientos; tiradas en el suelo, algunas prendas de abrigo que emplean para no enfriarse cuando paran los ensayos. La directora de la compañía se acerca a un grupo de bailarinas, que van a probar por primera vez el vestuario de 'Serenade', la legendaria coreografía de George Balanchine. «¿Cómo te sientes?», le pregunta Romero a una de ellas. «Muy bien», responde ella.
Está todo preparado. La pianista, en un rincón del estudio, dispuesta para tocar. Manuel Coves, el director de orquesta, está sentado ante el espejo, con la partitura de la 'Serenata para cuerdas' de Chaikovski -las notas, pentagramas y sus anotaciones la convierten en un jeroglífico para toda persona ajena a la música-, para observar los movimientos y anotar los 'tempi' y las respiraciones que los bailarines necesitan.
Las bailarinas se colocan en posición. Levantan el brazo derecho, con la palma extendida hacia afuera. George Balanchine contó cómo se le había ocurrido esta postura, en un viejo estudio en la calle 59 de Nueva York, donde trabajaba con la Escuela del American Ballet en 1934: «Un día llegué tarde a clase. Cuando abrí la puerta, vi a las diecisiete chicas ya puestas en línea, todas con el brazo derecho arriba, la palma hacia afuera, mirando hacia la luz. Pregunté: '¿Qué están haciendo?'. Una dijo: 'Una chica ha llegado tarde; al abrir la puerta, la luz nos ha dado en la cara y hemos levantado la mano para protegernos los ojos'. Yo dije: 'Muy bien, pues así va a empezar el ballet'».
Y así empieza, mientras Muriel Romero y las repetidoras de la compañía, Violeta Gastón y Cati Arteaga, van subrayando los movimientos con frases de ánimo o pequeñas correcciones. 'Serenade' supone, cuenta la directora de la CND, «la recuperación de una obra emblemática que trajo María de Ávila; lo hemos programado por ella». En efecto, esta pieza, estrenada ahora hace noventa años -vio la luz en Nueva York el 1 de marzo de 1935-, la interpretó por primera vez en Palma de Mallorca el 15 de diciembre de 1983. Curiosamente, quien montó la coreografía hace 42 años fue Patricia Neary, hermana mayor de la que se ha encargado de reponerla esta vez, Corinne Neary; las dos en nombre del George Balanchine Trust, que vigila que se mantenga y se divulgue el legado del creador ruso.
'Serenade' forma parte del programa titulado 'NumEros' que la Compañía Nacional de Danza estrena el jueves 11 en el Teatro de la Zarzuela. «Es una combinación de dos términos, 'numen' y 'eros', en cierto sentido opuestos pero que conforman dos elementos centrales en la creación en danza: 'Numen' como presencia intangible, inspiración poética o espiritualidad inmanente que trasciende la voluntad del artista; y 'Eros' como fuerza deseante, como impulso vital y creativo encarnado en el cuerpo», explica Muriel Romero.
Pura danza
Junto a la obra de Balanchine, se ofrecen 'Playlist (Track 1, 2)', de William Forsythe, con música neo-soul y house; y 'Echoes from a Restless Soul', de Jacopo Godani, sobre 'Gaspard de la Nuit', de Ravel -«es un guiño por los 150 años de su nacimiento»- . Son, dice la directora de la CND, tres maneras de ver la evolución del lenguaje clásico. «El nacimiento del neoclásico a través de Balanchine; el desarrollo de William Forsythe, que en esta obra juega coreográficamente de forma espacial y numérica, y aplica al lenguaje clásico el cubo de Laban -un método de análisis y clasificación del movimiento humano, desarrollado por Rudolf Laban-; y finalmente la mirada actual de Jacopo Godani, sobre una de las piezas más complicadas que existen para un pianista, y que aquí interpreta de manera impresionante Gustavo Díaz. «Es un programa difícil, exigente, pero es pura danza».
Nacho Duato: «Si la guerra de Ucrania terminara porque yo dejase de dirigir el ballet, lo haría»
Julio BravoEl coreógrafo valenciano, director artístico del Ballet del Teatro Mikhailovsky de San Petersburgo, presenta a su compañia, creada hace apenas un año. en el Teatro Albéniz de Madrid
Y es un programa, sigue Muriel Romero, que muestra la amplitud de repertorio que han de tener hoy en día las grandes compañías. «Al margen de los clásicos -y hay bailarines con una técnica maravillosa, como Mario Galindo, que necesitan bailar muchos 'Quijotes', por ejemplo-, no es lo mismo bailar a Jiri Kylian u Ohad Naharin que a Sharon Friedman o Marcos Morau… Los coreógrafos de hoy en día son muy personales, únicos. Sus vocabularios son muy diversos y existen necesidades muy diferentes. Para mí, un director tiene que impulsar la carrera artística de sus bailarines, y cada cuerpo y cada edad -aquí hay un abanico generacional muy grande- tiene también sus propias necesidades y repertorios más adecuados. Un bailarín de casi cuarenta años, y en la CND hay alguno, tiene otra experiencia y necesita otras cosas, trabajar con otro tipo de dramaturgos o de coreógrafos con un nivel de pensamiento coreográfico distinto al que tiene veinte. Hoy en día, el bailarín tiene que 'hablar' varios idiomas, y ha de estar siempre con la mente abierta».
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete