¿Dónde está el músico Gaztambide? El misterio de los tacones continúa

Técnicos de la sociedad científica Aranzadi de estudios forenses, encabezados por su presidente Francisco Etxeberria, han constatado que el cadáver es de una mujer.

«Se ha comprobado que sin ninguna duda el cadáver del ataúd, donde creíamos que estaba Gaztambide pertenece a una mujer», ha señalado Alejandro Toquero, alcalde de Tudela, antes de informar que «también han aparecido los tacones, tal y como se dijo en 1955«.

«Por tanto, no hace falta pruebas de ADN. Era una duda razonable que los restos no fueran los del músico y se ha confirmado«, ha añadido Toquero.

En la exhumación ha estado presente Joaquín Gaztambide, biznieto del maestro de la zarzuela, que se ha desplazado desde Andalucía para cotejar muestras de ADN si se daba el caso y ha agradecido al Ayuntamiento de Tudela que haya promovido esta investigación.

Toquero, que confiaba en que los restos fueran los de Gaztambide para poder cerrar por fin esa herida y honrar al músico con un mausoleo, no se va a dar por vencido. Tal como avanzó a ABC, hoy ha reiterado que se va a seguir trabajando en la búsqueda de los restos de Gaztambide. «Es una tarea complicada -ha admitido-, pero es una deuda pendiente con una de las figuras más importantes que ha dado Tudela».

El compositor navarro, autor de famosas zarzuelas como 'El juramento', 'Las hijas de Eva' o 'Los magiares', falleció en 1870 en su domicilio madrileño de la plaza de las Cortes. Tenía tan solo 48 años. Enterrado en la Patriarcal de San Martín, el 18 de marzo de 1921 sus restos fueron exhumados para ser trasladados a Tudela, su ciudad natal.

Una multitud despidió al féretro del insigne músico por las calles de Madrid hasta la estación del Mediodía, desde donde partió a la localidad navarra. Allí fue recibido también por un gran gentío y a la espera de que se construyera su mausoleo, su ataúd fue depositado en la capilla de la familia Garbayo hasta 1955, cuando se retomó la intención de construir un panteón en su memoria.

ABC relató entonces que «al abrir el féretro con el fin de tener todo preparado para llevar los restos al nuevo panteón, causó extrañeza ver que los zapatos eran de tacón alto. También se observó que las dimensiones del cadáver no correspondían a la altura del maestro Gaztambide». En la nota de la agencia Cifra se decía que el médico forense José María Remacha declaró tras un minucioso reconocimiento que el cadáver pertenecía a una mujer, tal como ahora se ha confirmado.

La noticia de la desaparición del maestro Gaztambide levantó cierta polvareda en la prensa de la época. El director del 'Diario de Navarra' dijo haber visto su cadáver en la iglesia de San Sebastián antes del traslado y en Tudela aseguraron que el ataúd que se abrió era el mismo que partió de Madrid, pero un periodista de 'La hoja del lunes' aseguró que el cadáver del músico seguía por entonces enterrado en el cementerio de la Almudena.

«Otros testigos que presenciaron el acto de su traslado aseguran que ya entonces circuló el rumor de que aquellos restos no pertenecían a Gaztambide», contó ABC, antes de añadir que «hubo en Tudela quien llegó a decir que les habían dado un picador de toros en lugar de Gaztambide, frase que se hizo entonces muy popular y que todavía se recuerda hoy, lo que demuestra que ya en su origen el asunto no estaba del todo claro».