Saratoga revive sus veinte años
La banda madrileña de heavy conmemoró dos décadas invitando a sus excomponentes
Les costó sangre y sudor asentarse, pero una vez que lo consiguieron nadie les ha podido bajar del pedestal. La banda madrileña de heavy metal Saratoga celebró este sábado sus veinte años con un concierto muy especial en el que participaron excomponentes del ... grupo a excepción del actual guitarrista de Santelmo Jero Ramiro. Hasta media docena de veces han cambiado de formación a lo largo de sus veinte años de historia. Actualmente solo Niko del Hierro permanece en la banda. Y lejos de tirar la toalla han mejorado.
La banda hizo un recorrido por sus nueve discos de estudio, que han experimentado una gran evolución musical. Así uno tras otro retumbaron temas con los que se fueron intercalando los músicos invitados. El concierto se fue calentado con «Luna llena», de «Secretos y revelaciones», segundo álbum de esta nueva etapa, para continuar con «Revolución» que conectó con el público desde los primeros compases. A la potencia de la voz de Tete Novoa, apoyada en el virtuosismo de Toni Hernando en la guitarra, se le unió el primer vocalista oficial de la banda, con quien grabó dos discos. Fortu Sánchez, histórico líder de Obús, cantó «Loco» para pedir «veinte años más de heavy metal».
Con «Deja vu» y «Hasta el día más oscuro», de su brillante último disco «Nemesis», dieron paso a un nuevo invitado, Dani Pérez, que cogió los mandos de una batería con la que grabó cuatro discos. «Resurrección», de «Agotarás», su mejor trabajo para muchos, y también «Ave Fénix», del «Tierra de lobos» fueron fundiéndose con un tema última cosecha: «Maltratador». Joaquín Arellano «El niño», otro de los baterías que «escribió una parte importarte en la historia», sacó sus mejores armas con «Lejos de ti», una balada con la que la sala se cubrió de azul, mientras Gabriel Boente cantaba también «Mi ciudad».
Despegó tras «El vuelo del halcón», uno de los trallazos de su séptimo álbum, otro de «Agotarás»: «Las puertas del cielo». Y de repente uno de los momentos más esperados; el regreso tras cinco años del vocalista Leo Jiménez. Mano a mano con Tete Novoa sacó las garras en «Vientos de guerra». Cayeron «Angel de barro» y el exitoso «Maldito corazón», con ambos cantantes doblando sus prodigiosas gargantas en una exhibición de potencia vocal.«No sufriré jamás por ti» y «El planeta se apaga» fueron despidiéndose antes de deslizar un contundente «Perro traidor» para acabar con «Heavy metal» con todos los invitados en el escenario para pone el broche final a una noche mágica.
Noticias relacionadas
Ver comentarios