La literatura japonesa y el fenómeno Pokémon se citan en otro Salón del Manga de récord

De momento, sin embargo, y a la espera de ver en qué queda ese posible traslado, el Salón del Manga volverá este fin de semana a la Fira de Montjuïc para darse un nuevo atracón de público y pulverizar todos los récords de una cita que, a cuatro días de su inauguración, ya ha agotado las entradas para sábado y domingo y prevé superar los 140.000 visitantes.

Unos números que se explican gracias a reclamos como los autores Hidenori Kusaka y Satoshi Yamamoto, responsables del manga de «Pokémon», una exposición centrada en rastrear las conexiones entre manga y literatura japonesa, la visita del maestro del terror Junji Ito o una presencia cada vez mayor de la cultura japonesa en el sentido más amplio del término.

«La cultura pop actúa como ventana a nuestro país, nuestro pueblo y nuestra cultura», subrayó la Cónsul General en funciones de Japón en Barcelona, Akiko Sagano, sobre una edición que apuesta por «satisfacer a muchos públicos diferentes», en palabras del director del Salón, Carles Santamaría, y que lo mismo busca los orígenes del manga en obras ilustradas del siglo XIX que pone el foco en el director de animación Yoshimichi Tamura o se adentra en el arte del taiko, el tambor ancestral japonés, de la mano del maestro Shogo Yoshii.

Con todo, buena parte del protagonismo se lo repartirán este año Pokémon, fenómeno de culto del que podrá verse una exposición sobre la adaptación al manga del popular videojuego, y la literatura japonesa, protagonista de una muestra que repasará sus conexiones con el manga y el anime al tiempo que explora los universos de tres autores concretos: las escritoras Banana Yoshimoto y Mitsuyo Kakuta, ambas presentes en el Salón, y el esquivo Haruki Murakami, sobre quien su traductor al catalán, Albert Nolla, ofrecerá una conferencia.

La granadina Belén Ortega, autora del cartel de este edición y del cómic sobre Marc Márquez, también tendrá una exposición en un salón que sigue ampliando su radio de acción y ahonda en la gastronomía nipona con una exposición sobre repostería, acerca tradiciones como la caligrafía y abraza la mitología para presentar a los yôkais, seres sobrenaturales del folclore nipón. Y todo esto sin perder de vista la música, el concurso de cosplay o los monstruos gigantes de raíces atómicas.