El grafiti de Bansky contra el espionaje podría ser retirado

La obra «Spy stand» del controvertido artista callejero Bansky podría tener los días contados. Eso es al menos lo que muchos piensan después de que haya aparecido un andamio alrededor de la cabina de teléfono que inspira el diseño.

El mural fue una reacción a los casos de espionaje que se destaparon a finales del 2013 El mural, que apareció a mediados del mes de abril en Cheltenham, muestra a unos hombres vestidos con gabardinas y gafas oscuras junto a una cabina de teléfono tratando de captar la conversación. Entonces, la obra fue atribuida de inmediato a Banksy, que no reconoció su autoría hasta dos meses después. Este trabajo fue una reacción a los casos de espionaje. Se da la circunstancia de que en Cheltenham se encuentra el centro GCHQ , que el año pasado quedó en entredicho después de las revelaciones del exempleado de la Agencia Nacional de Seguridad de EE.UU. ( NSA ) Edward Snowden sobre el espionaje masivo de su país y el Reino Unido de conversaciones telefónicas y correos electrónicos de millones de ciudadanos.

El mural, hallado en una pared de la calle Fairview, fue motivo de debate entre los vecinos de Cheltenham sobre la figura de Banksy. En el aparecen tres hombres con sombreros, gabardinas y gafas oscuras –perfil del espía de los años 50– junto a una cabina de la compañía de telecomunicaciones BT y con unos cables con los que intentan escuchar una conversación.

La cabina, cubierta por un andamio

Hoy se encuentra cubierto por una especie de andamio de madera que invitar a pensar en su desaparición, aunque hay quien asegura que se trata de una intervención temporal para proteger la pared, que se encuentra bastante deteriorada. Como artista callejero, la obra de Bansky se expone al riesgo de ser eliminada en cualquier momento. En esta ocasión, habrá que esperar para ver si realmente se trata de unas obras de acondicionamientoo de una orden de retirar el dibujo.