Las entidades reunidas en Adepi apoyan a la prensa contra Google

[ Lee aquí el artículo de Luis Enríquez: Lo que va de Jefferson a Google ]

En concreto Vegap, la entidad de los artistas visuales, se mostró ayer favorable a que se reconozca que los editores y autores «sean justamente remunerados por quienes se enriquecen con este trabajo creativo y ponen en peligro tanto la actividad creadora, como la libertad de prensa, al pretender eludir esta justa remuneración». «El ejercicio de este derecho es irrenunciable y para garantizar su cumplimiento en la trasposición de esta Directiva al Derecho español es necesario que se regule su irrenunciabilidad y se establezca la gestión colectiva obligatoria de este derecho para proteger a los titulares del mismo de las presiones de los grandes conglomerados empresariales de las industrias tecnológicas», señalaba Vegap.

En Francia, donde se ha permitido la gestión individual mediante acuerdos confidenciales, la ministra de Cultura, Roselyne Bachelot, pidió ayer a Google que no se limite al primer acuerdo alcanzado con la Alianza de la prensa de información general, que representa sólo a una parte de los diarios franceses. El acuerdo permitirá a los periódicos cobrar una remuneración todavía desconocida que no satisface a toda la prensa nacional.

Google ha negociado a varias bandas, con el fin, parcialmente conseguido, de dividir a la prensa, sin respetar de manera clara y definitiva la citada Directiva , «relativa al plazo de protección del derecho de autor y determinados derechos afines». En Francia, Google comenzó por negociar acuerdos individuales con algunos diarios, como «Le Figaro», «Le Monde», «Liberation», entre otros. La negociación individual y confidencial permitía a Google estar en situación de fuerza dominante , siempre. El pago no sería en concepto de derecho de autor y por tanto excluye a los periodistas.

Google lazó el otoño del 2020 su iniciativa News Showcase, presentada como una «herramienta» que ofrecería nuevos servicios a sus usuarios y permitiría pagar a los medios de comunicación, según «un sistema de licencias de contenido». Los acuerdos y proyectos de acuerdos individuales fueron recibidos con reservas, críticas e inquietud por el conjunto de la prensa francesa, forzado una nueva negociación entre Google y la APIG, mucho más representativa de la prensa diaria.

Tras varios meses de negociaciones aparentemente duras y «complejas», Google y la APIG terminaron anunciando un acuerdo global, por tres años, presentado en estos términos: «Al final de muchos meses de negociaciones, hemos llegado a un acuerdo marco, bajo las autoridades de tutela de la competencia ».

Google y la APIG, sin embargo, han preferido considerar secretos los términos del acuerdo « global». A partir de ese «marco», Google seguirá negociando con cada medio, en particular, según muy diversos criterios: características de la licencia para el uso o distribución de los trabajos periodísticos, características de los contenidos, audiencias internet mensuales. Ni Google ni la APIG han deseado informar o comentar el acuerdo marco y los posibles acuerdos parciales al más importante de los medios franceses, la Agencia France Press (AFP) El acuerdo marco ha suscitado reacciones de diversa naturaleza.

Diplomática, Roselyne Bachelot, ministra de Cultura , estima que el acuerdo marco «es una primera etapa, necesitada de nuevas etapas y negociaciones» . Pierre Louette, presidente director general (PDG) del grupo «Les Echos» (matutino financiero), y presidente de la APIB, ha declarado: «El acuerdo marco es el reconocimiento efectivo de los derechos afines al derecho de autor y permitirá que sean remunerados los diarios y plataformas numéricas».

Fabrice Fries, presidente de la AFP, la gran agencia nacional, contempla el acuerdo desde esta óptica: «Nos parece positivo que el derecho de los derechos afines se materialice, por vez primera en Europa. Tras ese primer paso, el más difícil, esperamos que Google continúe en esa línea y extienda ese reconocimiento y derechos a otros actores, como las agencias de información» .

El Sindicato de los editores de prensa magazine (SEPM) no ha firmado el acuerdo y ha presentado una querella contra Google, por estas razones de principio : «Debemos continuar nuestros esfuerzos, para conseguir una justa remuneración para toda la prensa francesa, de la que Google se beneficia en gran manera».