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ABC Cultural

El origen de los insultos más populares

La filosofía del abrazafarolas: «Que hablen de ti, bien o mal, pero que hablen»

En el frenesí de lo mediático, las conversaciones de barras de bar se han extrapolado a otros campos con muchos más espectadores

La filosofía del abrazafarolas: «Que hablen de ti, bien o mal, pero que hablen» Isabel B. Permuy

A. S. MOYA

En este mundo de apariencias ha ido cogiendo protagonismo la polémica corriente de captar la atención aunque sea contraproducente para el propio protagonista. «Que hablen de ti, bien o mal, pero que hablen». Y así, en base a este eslogan se extiende todo un submundo ... de personajes que han potenciado su vida profesional y personal con independencia de quedar continuamente retratados. En el frenesí de lo mediático, las tradicionales conversaciones de barras de bar se han extrapolado a otros campos con muchos más espectadores. Las televisiones se llenan de charlatanes, los estrados ya no son espacios exclusivos para intelectuales y los micrófonos amplifican las voces de quienes en realidad no tiene nada que decir.

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