Mueren intoxicados tres miembros de una misma familia en Sevilla

El centro de coordinación de Urgencias y Emergencias sanitarias recibió una llamada a las 2.55 horas en la que se solicitaba asistencia por un cuadro de nauseas y vómitos. Un equipo móvil de cuidados críticos de Alcalá se desplazó hasta la vivienda y atendió a todos los miembros de la familia.

Pero, a las 9.09 de la mañana, un vecino del bloque volvió a llamar a emergencias porque los miembros de la familia se encontraban muy mal y tenían vómitos. Cuando llegaron los sanitarios, el padre y la madre se encontraban en muy mal estado asegurando que tenían la visión borrosa y, mientras los atendían, la hija menor, de 13 años, avisó desde su habitación de que tenía vómitos, por lo que los sanitarios acudieron en su auxilio.

Sin embargo, no podían acceder a su habitación porque el perro que dormía con ella les impedía la entrada, por lo que avisaron a la otra hija para que les ayudase y, al no encontrar respuesta, fueron hasta su habitación donde la encontraron inconsciente. Hasta el lugar de los hechos había acudido ya un equipo del 061 que había sido alertado por los propios sanitarios viendo la situación de la familia.

Durante más de 30 minutos, los servicios de emergencias intentaron reanimarla sin poder hacer nada por salvar su vida. Mientras, los otros tres miembros de la familia empeoraban, ya que el padre y la madre perdieron el conocimiento. Durante el traslado al hospital, el varón tuvo una parada cardiorespiratoria que los profesionales consiguieron reanimar antes de ingresar en el Hospital de Valme, donde también ingresaron a su esposa.

Ambos fallecían horas después, la mujer, de 50 años, a las 17.15; y el varón, de 61 años, a las 18.00 horas. La hija pequeña de la familia fue traslada al Hospital Infantil de Virgen del Rocío, donde permanece ingresada y está estable aunque su pronóstico es reservado.

La Policía Científica está investigando las posibles causas de este extraño suceso y, durante toda la mañana de ayer, estuvo tomando muestras en el domicilio, como evidenciaban los botes para muestras que introdujeron en el piso. También se personaron en la vivienda de la calle Pesadora un equipo de Salud Pública que realizó una encuesta epidemiológica entre los vecinos y realizó una toma de muestras. Estas muestras están bajo investigación judicial y serán analizadas desde el punto de vista toxicológico y microbiológico para determinar las posibles causas del fallecimiento y la hospitalización. La juez encargada del caso ha decretado el secreto del sumario.