Un experto en longevidad detalla los cuatro alimentos que no deberíamos tener en casa: «Son los más asociados con la obesidad»

Así, además de darnos energía y proporcionarnos los nutrientes necesarios para desarrollar todas las actividades del día a día, los alimentos pueden tener la capacidad de aportarnos beneficios pero también problemas e incluso enfermedades.

Esto último puede ocurrir cuando abusamos de comidas que no son positivas nutricionalmente hablando y que cuentan con elementos, sustancias o compuestos que hacen daño a nuestro cuerpo y, a la larga, pueden terminar favoreciendo la aparición de patologías, dolencias y trastornos.

Aunque no hay alimentos prohibidos y podemos darnos el capricho de tomar algo considerado como poco saludable de vez en cuándo, sí es bueno ser conscientes de los tipos de comida cuyo consumo no nos hace bien y debemos limitar.

En este sentido, el experto en longevidad Dan Buettner, reconocido por su investigación sobre las llamadas 'zonas azules', que son regiones del mundo donde la gente vive más años y de forma más saludable—, ha identificado cuatro grupos de alimentos que aconseja no tener en casa si se quiere evitar la obesidad y mejorar la esperanza de vida.

Según Buettner, estos alimentos son los más asociados con la obesidad y con desarrollar un mayor riesgo de enfermedades como el cáncer, entre otras. Así lo ha compartido en su cuenta de Instagram a través de un vídeo:

«No me importa si sales de vez en cuando y te das un capricho» comienza diciendo el experto en longevidad, «pero las cuatro cosas que nunca deberían entrar por la puerta principal de tu casa son: Número uno, las carnes procesadas: sabemos que están asociadas al cáncer, número dos, las bebidas azucaradas: como los zumos de frutas y las Coca-Colas y los Mountain Dew, son la fuente número uno de azúcar refinado en la dieta americana», explica.

Y continúa exponiendo la lista: «La tercera cosa que nunca deberías tener en casa, aperitivos salados: sabemos que son los más asociados con la obesidad, y lo último son los dulces envasados: también altamente asociados con la obesidad», concluye. Para finalizar, Buettner afirma que si quieres disfrutar de estas cosas, puedes salir y consumirlas, «pero no las tengas tentándote todo el tiempo en tu casa y nos veremos cuando tengas 100 años», sentencia.

Los alimentos que enumera pueden ser una tentación algo envenenada ya que, aunque resultan apetecibles y fáciles de consumir, aportan muchas calorías, grasas, azúcares, sal, etc, y pocos nutrientes esenciales. Sumado a esto, a veces pueden ser adictivos y se relacionan con un mayor riesgo de enfermedades como la obesidad. Buettner recomienda que, si el objetivo es vivir más y mejor, lo ideal es mantener estos productos fuera de casa y optar por alternativas saludables.