Sarkozy: «Los socialistas han perdido la batalla moral»
Martine Aubry convoca una reunión para pactar la unidad de las familias socialistas
JUAN PEDRO QUIÑONERO
El escándalo sexual de Dominique Strauss-Kahn (DSK) está llamado a influir profundamente en el destino de Francia. Nicolas Sarkozy estima que el Partido Socialista francés «ha perdido la batalla moral» de la próxima elección presidencial. Los «elefantes» (socialistas históricos) del PS se inclinan por ... una candidata, Martine Aubry. Mientras la ultra Marine Le Pen espera su hora con impaciencia.
Jean-Pierre Raffarin, ex primer ministro (liberal–conservador), resume el terremoto de este modo: «Habrá un antes y después del escándalo DSK. Es rarísimo, excepcional, que un acontecimiento provoque una onda de choque tan excepcional».
Durante un desayuno de trabajo con la élite de su gobierno, su partido y su grupo parlamentario, Nicolas Sarkozy dejó caer: «Los socialistas han perdido la batalla moral de las presidenciales. Lo más sensato, por nuestra parte, será trabajar con sangre fría, y dar pruebas intachables de unidad y dignidad».
«Dignidad» es la palabra clave para iluminar mejor el estado de crisis y consternación de una oposición socialista caída en una trampa de doble fondo: el escándalo sexual del candidato favorito de la izquierda socialista; y las cacerolas de una «izquierda caviar» que tiene muchos otros rostros conocidos entre los «elefantes», burócratas y líderes socialistas.
Martine Aubry, primera secretaria del PS, convocó ayer una reunión de urgencia del Comité Nacional del PS, con el fin de pactar la unidad entre las distintas familias socialistas, ante la crisis precipitada por el escándalo sexual de DSK.
Los «elefantes», la burocracia interna y los más viejos pretendientes al liderazgo se están inclinando por Martine Aubry, como posible candidata socialista contra Nicolas Sarkozy. Sin embargo, la primera secretaria socialista todavía debe sortear una imprevisible campaña interna. El PS elegirá su candidato o candidata a la presidencia de la República en unas elecciones primarias que deben celebrarse a finales de junio. Aubry puede ser la candidata oficiosa del aparato socialista. Pero deberá vencer la resistencia de otros correosos aspirantes, como François Hollande y Ségolène Royal, marido y mujer antes de que la política los divorciara.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete