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Pequeñas ciudades con historia para pasar un verano inolvidable en España

Salamanca, Ávila. Cuenca o Teruel esconden en sus calles, plazas, iglesias, murallas y palacios miles de años de historia

Toledo, Ávila. Cuenca, Teruel o Santiago de Compostela

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Este verano será diferente y por ello hay que buscar alternativas en España a esas ciudades europeas que copan páginas enteras de las guías de viajes. Salamanca, Ávila. Cuenca, Teruel o Santiago de Compostela esconden en sus calles, plazas, iglesias, murallas y palacios miles de años de historia.

1

Salamanca

Salamanca es una de las ciudades españolas sinónimo de cultura y monumentalidad. Su Universidad es el centro de enseñanza en activo más antiguo de España lo que confiere a la ciudad un ambiente juvenil característico .

En 1988 la ciudad fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y cuenta con un importante patrimonio arquitectónico, entre el que destacan sus dos catedrales, la Catedral Vieja y la Nueva, la Casa de las Conchas, la Plaza Mayor, el Convento de San Esteban y las Escuelas Mayores.

2

Cuenca y la Ciudad Encantada

Asentada entre las hoces de los ríos Júcar y Huécar, la ciudad de Cuenca, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco por su riqueza monumental destaca por su casco histórico. La Catedral, las Casas Colgadas, las calles empedradas, las ruinas del castillo árabe o la antigua alcazaba parecen trasladar al viajero a otro tiempo.

Un antiguo convento de dominicos alberga el Parador de Turismo de Cuenca, donde el huésped descansará y degustará las recetas más tradicionales de la región.

A pocos kilómetros se encuentra La Ciudad Encantada , un paraje natural de formaciones rocosas calcáreas o calizas formadas a lo largo de miles de años. Declarada Sitio Natural de Interés Nacional el 11 de junio de 1929, la acción del agua, el viento y el hielo ha hecho posible este fenómeno kárstico. A las caprichosas y espectaculares formaciones existentes hay que sumar lapiaces, torcas y sumideros. Tarifa general 5 euros.

3

Córdoba

Hablar de Córdoba es hacerlo de un amplio legado histórico que ha dejado su huella en un inmenso patrimonio cultural y monumental.

Sus callejuelas, en el centro histórico, invitan a pasear entre sus arcos y descubrir su historia a través de su arquitectura. Es precisamente en el casco histórico, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1994, donde encontramos la Mezquita-catedral, el monumento más importante del Occidente islámico y declarado Patrimonio de la Humanidad en 1984. Con 23.400 metros cuadrados, fue la segunda mezquita más grande del mundo en superficie, por detrás de la Mezquita de la Meca, siendo sólo alcanzada posteriormente por la Mezquita Azul de Estambul.

El turistas tampoco podrá perderse los baños árabes, sus casas palacio y como no sus patios aunque no es hasta el mes de mayo cuando se celebre el Festival de los Patios Cordobeses.

4

Segovia

A poco más de una hora de Madrid se sitúa la ciudad castellanoleonesa de Segovia , famosa por el impresionante acueducto que cruza la ciudad, uno de los monumentos mejor conservados de la época romana. Además el Alcázar , una de las residencias favoritas de los Reyes de Castilla en la Edad Media, es otro de los grandes símbolos de la ciudad. A nivel gastronómico, el cochinillo asado en horno de leña tradicional es la especialidad, realizando el corte con un plato en vez de con cuchillo para certificar el punto de la carne, como manda la tradición.

5

Toledo

La ciudad de Toledo , a una hora en coche de Madrid, es una buena opción porque permite disfrutar de la riqueza monumental de la villa y su amplia oferta gastronómica, cultural y de ocio. Conocida como «ciudad de las tres culturas», debido a la convivencia durante siglos de cristianos, árabes y judíos, Toledo conserva tras sus murallas un legado artístico y cultural en forma de iglesias, palacios, fortalezas, mezquitas y sinagogas.

Esta gran diversidad de estilos artísticos convierte el casco antiguo de la capital de Castilla - La Mancha en un auténtico museo al aire libre, hecho que ha permitido su declaración como Patrimonio de la Humanidad.

6

Teruel

Teruel está considerada como una de las diez ciudades más románticas de Europa gracias a la legendaria historia de sus Amantes además de ser la capital mundial de la arquitectura Mudéjar .

Este verano es el perfecto para pasear por sus calles y contemplar la mejor arquitectura mudéjar en las Torres o la techumbre de la Catedral, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y visitar el Mausoleo de los Amantes -Diego e Isabel, protagonistas de la más bella historia de amor jamás contada-. Y es que Teruel envuelve al visitante en una atmósfera de misterio propia de los siglos XI y XII.

Para aquellos que les guste el mundo animal o que viajen con niños nada mejor que visitar Dinópolis para descubrir cómo era Teruel hace 150 millones de años y ver a tamaño natural los dinosaurios que poblaban esta provincia.

7

Cáceres

Patrimonio de la humanidad desde 1986, el centro histórico de Cáceres es uno de esos destinos que hay que visitar por su excepcionalidad.

En la plaza Mayor se encuentra el ayuntamiento, y junto a él la muralla en la que destaca la torre de Bujaco. En el centro histórico, que es un laberinto de calles empedradas y muchas cuestas se encuentra la plaza de Santa María, donde encontramos varios edificios de los siglos XV y XVI. El lado sur de la plaza lo ocupa la concatedral de Santa María, que es un ejemplo de transición del románico al gótico.

Entre muchas otras cosas también debemos visitar la plaza de San Jorge, en uno de sus laterales se encuentra el Palacio de los Golfines de Abajo, donde se alojaron alguna vez los Reyes Católicos. El edificio que domina la plaza es la iglesia jesuita de San Francisco Javier. Es reconocible por sus dos torres cuadradas.

El museo de Cáceres se encuentra ubicado en dos edificios, el Palacio de las Veletas, del siglo XVII, y la Casa de Caballos, que fue en su momento unas antiguas caballerizas.

8

Ávila

Ávila , ciudad de Castilla y León, a una hora de Madrid, es uno de esos destinos que nunca defraudan. Murallas, casas, palacios, templos, conventos, configuran el rico patrimonio artístico de la ciudad, fruto de un enriquecedor pasado histórico protagonizado por las culturas que en ella convivieron.

La imagen de la ciudad medieval viene configurada por sus murallas, levantadas a lo largo del siglo XII y con un perímetro de 2.516 metros, 87 torreones y 9 puertas.

Sin embargo fue en el siglo XVI cuando la ciudad conoce su máximo esplendor. Es la ciudad de la mística y de la espiritualidad, su mejor exponente es Teresa de Cepeda y Ahumada. Si hacemos un recorrido teresiano iremos del gótico al renacimiento, del manierismo al barroco a través de la vida y obra de nuestra Santa más universal.

9

Zaragoza y el Monasterio de Piedra

Zaragoza, situada a orillas del río Ebro y a medio camino entre Madrid y Barcelona, ofrece al visitante un impresionante legado monumental en sus calles, ya que romanos, musulmanes, judíos y cristianos dejaron su huella en este lugar: ruinas de la civilización romana como el Teatro; el Palacio de la Aljafería; iglesias de estilo mudéjar, declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco; joyas del barroco como la basílica del Pilar.

Para los amantes de la naturaleza nada mejor que perderse en el Parque Natural del Monasterio de Piedra , un recorrido donde el agua, las cascadas y las grutas son las protagonistas.

Declarado Paraje Pintoresco Nacional en 1945 se encuentra integrado en la red de espacios protegidos de Aragón y en el año 2010 fue declarado Conjunto de Interés Cultural en la categoría de Jardín Histórico. Junto a la entrada al Parque se levanta el Monasterio de Piedra, fundado en 1194 por trece monjes cistercienses venidos del Monasterio de Poblet, en el antiguo castillo de Piedra Vieja y junto al río Piedra.

10

Santiago de Compostela

Este 2020 es un buen año para visitar Santiago de Compostela que cada verano se llena de turistas y peregrinos. La crisis del coronavirus hará que sean menos los extranjeros que acudan a la ciudad gallega que espera con ilusión su Año Santo en 2021, once años después del último Xacobeo.

La Catedral de Santiago de Compostela es la obra más sobresaliente del arte románico en España. Es, además, la meta final de todos los Caminos de Santiago que durante siglos han llevado a los peregrinos de la Cristiandad hacia la tumba de un apóstol. Junto a la Catedral, son visita obligada las cuatro plazas que la rodean -Obradoiro, Quintana, Inmaculada y Praterías- así como el Hostal de los Reyes Católicos; el Mercado de Abastos; el Convento de Santa Clara o Colegio de Fonseca entre otros muchos.

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