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El único sector de la nieve que está haciendo negocio esta temporada

El responsable de una de las mayores fábricas de raquetas de nieve del mundo afirma que en un mes ha recibido más pedidos que en todo un año normal

Raquetas de nieve en Semnoz, en la localidad de Viuz-la-Chiesaz, cerca de Annecy REUTERS/Denis Balibouse

Cecila Mantovani (Reuters)

A nadie le agrada la epidemia de Covid-19 y la muerte que provoca, pero Philippe Gallay, jefe de uno de los mayores fabricantes de raquetas de nieve del mundo, reconoce que ha sido bueno para los negocios . Las ventas de su empresa se han disparado.

En Francia, donde tiene su sede la firma TSL que dirige Gallay, y en otros países, los gobiernos han cerrado o limitado el uso de las estaciones de esquí, de telesillas y teleféricos. Sin medios mecánicos para trasladarse por las pistas, los esquiadores y los practicantes del snowboard han recurrido a una solución de la vieja escuela: las humildes raquetas de nieve .

El mes pasado, la fábrica de Gallay en Annecy, en los Alpes franceses, recibió p edidos por 100.000 pares de raquetas de nieve , tres veces la cantidad que, antes de la pandemia, produciría durante todo un año.

«Estamos sepultados por las órdenes», dijo Gallay. «Pero es un estrés bueno... En lo que respecta al Covid-19, somos los afortunados, tenemos que reconocerlo».

Gallay ha cambiado su fábrica para que funcione las 24 horas del día y ha contratado a instructores de esquí y operadores de ascensores, sin trabajo debido al virus, para aumentar sus empleados a 80 desde los 20 habituales. Aun así, no puede satisfacer la demanda. Tiene una cartera de 40.000 pedidos.

En la estación de esquí de Semnoz , a media hora en automóvil de Annecy, la tienda de alquiler de equipos se queda sin raquetas de nieve alrededor de las 9.30 cada mañana, dijo Gregoire Chavanel, directora de la estación. Moverse con raquetas de nieve es «lo único que se puede hacer esta temporada».

Bajo el bloqueo de Francia, las escuelas y las tiendas no esenciales están abiertas y se permite el deporte profesional de alto nivel. Hay toque de queda desde las 18.00 h. todas las noches, con teatros, cines, gimnasios, restaurantes, cafés y bares cerrados. Pero las pistas de esquí están abiertas para quienes deseen subirlas a pie.

Lucie Godineau, que vive en un pueblo cercano, caminaba penosamente por el polvo con sus raquetas de nieve. Normalmente, utilizaría esquís, pero con el telesilla fuera de servicio, eso queda descartado.

«Lo extraño», dijo sobre el esquí alpino. Pero se ha reconciliado con la realidad, al menos durante esta temporada. «Son raquetas de nieve y nada más».

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