Los retos de Nintendo para sobrevivir a los «smartphones»

La compañía de videojuegos Nintendo siempre se había negado a formar parte del mercado de videojuegos para móviles. Era frecuente las negativas de la compañía, y muy expresivas las del mítico diseñador Shigeru Miyamoto , creador de Mario y Zelda . Sin embargo, en los últimos meses la compañía había suavizado su oposición para preparar el camino. El presidente, Satoru Iwata , finalmente ha cedido a la presión de los accionistas. La respuesta de la Bolsa fue inmediata: las acciones subieron un 21,3% el día después del anuncio.

Los juegos para móviles cada vez generan más dinero dentro de la pujante industria de los videojuegos. Este año se prevé facturar 88.400.000 dólares en todo el mundo en todas las plataformas; de los que el 30% vendrá de las aplicaciones. En 2013, los móviles solo aportaban el 18% de los 70.400.000 dólares recaudados. En 2017, está previsto que sea el 35,4% de los 102.900.000 dólares. Un porcentaje al que Nintendo ha decidido dejar de renunciar.

Para entrar en el mercado de los «smartphones», Nintendo ha firmado un acuerdo con DeNa , la compañía líder de juegos para móviles en Japón, y ha adquirido un 10% de ella. DeNa, por su parte, ha comprado el 1,24% de la empresa de Kyoto. Nintendo mantiene el control creativo de sus juegos y DeNa trabajará el servicio y la distribución.

Nintendo nunca ha cedido el control de sus juegos para asegurar la calidad de sus títulos. La base de la compañía es la creación de hardware y, a partir de ahí, juegos que exploten esas características diferentes a la competencia. Sus juegos no estaban destinados a consolas de la competencia. Nunca quiso ser una «third party», una compañía que hace juegos para otras máquinas.

Nintendo ha anunciado que no se limitará a llevar sus juegos ya creados para consola, sino que creará otros pensados expresamente para jugar móviles. La compañía también desveló que sus estrellas (como Mario, Zelda o Metroid ) entrarán en juego en los móviles. La idea, según desveló DeNa, no es crear un gran número de juegos al año, sino unos pocos, entre diez y 20, muy ambiciosos capaces de competir con las aplicaciones más populares, como « Candy Crush » o «Clash of Clans».

Nintendo quiso demostrar que su salto a los móviles no significa renunciar a las consolas. Por eso, en el mismo acto, anunció un proyecto en marcha, con el nombre provisional de NX . No dio más detalles, ni siquiera si se trata de una consola, una portátil o un híbrido, como se decantan algunos analistas a partir de la decisión de la compañía japonesa de unir los departamentos de investigación de portátiles y consolas. O si se tratará de una plataforma que dé servicio a una nueva generación de dispositivos de ocio. No hay fecha de lanzamiento.

La firma japonesa estaba muy rezagada en el online. Ahora ha anunciado también la creación de una plataforma, Nintendo System , para dar servicio no solo a sus consolas, sino también a móviles, tabletas y PC, un mercado inédito hasta ahora. Su lanzamiento está previsto para otoño de este año.

Nada se sabe del modelo de negocio. ¿Distribuirá sus juegos a través de las plataformas Google Play o Apple Store , con el ingente volumen de aplicaciones y la dificultad de hacerse ver? ¿Tendrá un plataforma alternativa? ¿Será por suscripción al servicio Nintendo System ? ¿Serán de pago o explotarán el modelo «freemium», esto es, gratuitos pero con opciones de micropagos para continuar en el juego? Todavía es pronto para despejar estas dudas.

Nintendo no está mal financieramente. El año pasado impulsó las ventas gracias a lanzamientos que revitalizaron la compañía, como « Super Smash Bros. » y franquicias inagotables como Pokémon . Aunque la apuesta de Wii U , con 9.2 millones de unidades vendidas, no ha terminado de despegar. Sus números ya han sido superados por sus compañeras de generación. En la mitad de tiempo, Sony ha vendido 20 millones de PlayStation 4 ; y Microsoft, 11 millones de Xbox One . El ciclo de vida de las consolas tradicionalmente es de cinco a siete años. Sin embargo, Nintendo anuncia ya el desarrollo de una nueva a pesar de que Wii U salió en 2012 y de que acaba de lanzar este febrero una nueva versión de su última portátil, New Nintendo 3DS .

Los catastrofistas anuncian un declive, como le ocurrió a Sega , que se repartió el liderazgo con Nintendo a finales de los ochenta y principios de los noventa. Acabó por dejar de fabricar consolas a principios del siglo XXI y ahora está sin rumbo , lejos de la primera línea. Sin embargo, son muchos los que mantienen su fe en la compañía por los siguientes motivos:

Nintendo ha inventado prácticamente los juegos móviles. Suyas son las Game&Watch, las primeras maquinitas; la Game Boy (118,7 millones de unidades vendidas), la DS (154,5 millones, la segunda consolas más vendida de las historia tras PS2) y ahora la serie 3DS (50,4 millones). El salto a los móviles era un paso lógico, más aún teniendo en cuenta que en Japón cada vez importan menos las consolas de mesa y más los dispositivos portátiles.

Nintendo se ganó a los jugadores casuales gracias a Wii y DS, especializados en aspecto amable, en la jugabilidad, adaptada al tipo de dispositivo. Con Wii U y 3DS ha mantenido ese estatus, sin renunciar a otros nichos. Los juegos para móviles son, al fin y al cabo, pasto de los jugadores casuales.

Nintendo tradicionalmente apuesta por un movimiento renovador, un nuevo concepto de juego que le diferencie de la competencia. Ahora intenta adelantarse una vez más a las competidoras, aunque puede ocurrirle que se quede en tierra de nadie, como pasó con Nintendo 64, lanzada entre la generación de PlayStation y PS2, y ahora con Wii U.

En una entrevista con motivo del lanzamiento de New 3DS, Manuel Curdi , jefe de producto en España de las consolas portátiles de la compañía japonesa, desdramatizaba al diario ABC la situación de la compañía: «Siempre nos están matando, ahora con los móviles; pero siempre inventamos algo nuevo diferente». «El secreto es hacer un tipo de producto incopiable. Explotar cosas que no nos puedan imitar», dijo.