Todo lo que debes saber antes de subirte a una moto de agua este verano

La clave es, como todo lo que es nuevo, informarse bien antes de hacerlo pra garantizar que el plan sale a pedir de boca. De la mano de Amanda Zaragoza, country manager de SamBoat en España, empresa de referencia en nuestro país en el sector del alquiler de embarcaciones de recreo y motos de agua, respondemos a las preguntas básicas que todo el mundo se hace antes de alquilar una moto de agua sin experiencia y subirse a ella por primera vez en la vida.

No. Las motos de agua no requieren que el piloto tenga un permiso específico. «La regularización sobre las licencias de manejo de embarcaciones dependen del país en el que se vaya a llevar a cabo la navegación. En el caso de España, las embarcaciones con menos de 6 metros de eslora, en el caso de los veleros, o inferior a 5 metros y con un motor inferior a 15 cv, no precisan de titulación para ser manejadas, por lo que recibirás una pequeña formación sobre el funcionamiento de la moto de agua antes de embarcar por parte del propietario», explica Amanda Zaragoza.

La frontera que marca cuándo una moto de agua sí requiere un permiso especial es el motor, que sea superior a 15 cv. En ese caso, indica Amanda Zaragoza, «precisarás de una licencia de Patrón de Navegación Básica, conocida como PNB».

En motos de agua que no precisen permiso especial de navegación, las de motor inferior a 15 cv, la limitación más destacable es que es necesario tener más de 16 años para montar en solitario. «En caso contrario, el menor habrá de ir acompañado de un adulto o tutor legal», señala la country manager de SamBoat en España.

Además, puede existir una inhabilitación por cuestiones médicas. Es el caso de pacientes «con un alto grado de epilepsia», apunta Amanda Zaragoza a modo de ejemplo.

Amanda Zaragoza tiene claro que es un error habitual «esperar al último momento» porque las motos de agua «son posiblemente de las embarcaciones más demandadas durante la temporada alta».

Como ocurre con los coches de alquiler en destinos muy turísticos durante el verano, las flotas de motos de agua son limitadas en cada destino. Por ello, la experta aconseja alquilarla de manera adelantada. «Esperar al último momento puede desembocar en el riesgo de que no haya motos acuáticas disponibles para las fechas deseadas o que los precios hayan subido bastante, algo que pasa sobre todo en destinos muy conocidos como las Islas Baleares o la Costa Brava catalana», argumenta la responsable nacional de SamBoat. Además de por una cuestión de demanda, Amanda Zaragoza recomienda adelantar el alquiler todo lo posible para «beneficiarte de las mejores oportunidades y tengas tiempo más que suficiente para charlar con el propietario y resolver cualquier duda que tengas».

Al alquilar una moto de agua se acuerda una fianza y hay que prestar especial atención a los daños (seguro) y si entra o no el combustible en el precio acordado. Estamos son los tres aspectos principales que destaca Amanda Zaragoza en este punto.

«Cualquier tipo de incidente o daño al vehículo correrá a cargo del usuario a través de la fianza, la cual es establecida por el propietario. En caso de siniestro o que la fianza sea insuficiente, el inquilino habrá de hacerse cargo de los gastos de reparación o indemnización al propietario en caso de no contar con un seguro de compra de fianza, en cuyo caso se cubrirán hasta 5.000 €», dice.

En lo que respecta al combustible, como ocurre con los coches, algo que depende del propietario y de la embarcación, «el precio final de esta puede incluir o no el combustible; en caso de que no lo cubra, el navegante habrá de devolver la embarcación con el depósito lleno, tal y como fue entregada», apunta la country manager de SamBoat.

«El precio final del alquiler de una moto de agua depende de diferentes factores, como serían el destino donde se desea alquilar, la temporada, las características de la embarcación y la duración del alquiler», expone Amanda Zaragoza.

Preguntada por ello, la country manager de SamBoat concreta que en España, los precios parten, «por lo general», a partir de 80 o 90 euros al día con un tope de 500 euros diarios en algunos casos. «Si bien es cierto que, por lo general, todas las embarcaciones son alquiladas por días o semanas, en SamBoat disponemos también de la opción de alquilar embarcaciones para media jornada u horas; sin embargo, es algo que depende del propietario de cada moto de agua», matiza.

Depende de la legislación, pero en España la respuesta es sí. Lo explica Amanda Zaragoza: «Existen masas de agua dulce sin salida al mar en España donde se puede disfrutar de la aventura de alquilar una moto de agua, como el Embalse de La Serena, en la provincia de Badajoz».

En otros lugares, como el pantano de San Juan de Madrid, las motos de agua se prohibieron hace dos años. «Actualmente ya no existe ningún pantano en Madrid donde la navegación con motos de agua esté permitida, debido a que suponían una amenaza para el desarrollo de los ecosistemas de águila imperial», señala Amanda Zaragoza.

Todo el material está incluido en el precio o debería estarlo, por lo que «siempre recomendamos asegurarse preguntando al propietario de la moto de agua sobre la disponibilidad de este para alquilar», indica la country manager de SamBoat. Lo único que que es obligatorio en realidad al manejar la moto de agua es el chaleco salvavidas.

Amanda Zaragoza explica que el proceso es similar al del alquiler de un coche. Solo tienes que cerrar el acuerdo de alquiler y contactar con el propietario para ultimar los detalles. Si has hecho antes de llegar al destino tú reserva, «el propietario te indicará en qué punto exacto quedar el día del alquiler y te dará una pequeña formación sobre el uso de la moto de agua en caso de que sea necesario», dice la country manager de SamBoat. Si la reserva la has formalizado in situ, la formación probablemente la recibirás al momento.

«Una vez finalizado el alquiler, devuelves la embarcación al propietario y se carga la parte final del alquiler o el gasto de combustible en caso de que este no vaya incluido», concreta Zaragoza.

Existen normativas de uso distintas en función de la zona geográfica en la que vamos a manejar una moto de agua. Por eso, Amanda Zaragoza recalca la importancia de conocer dicha legislación. «Dependiendo de la zona, incluso dentro de un mismo país, esta puede variar en cuanto a los metros que podemos alejarnos del puerto o cuán cerca de la zona de baño podemos estar», subraya. «También puede variar la velocidad de navegación en puerto o en zonas señalizadas para la navegación que se encuentren muy cerca de bañistas», añade.

En cualquier caso, en todos los casos es responsabilidad del usuario tanto cumplir la legislación como el cuidado de la moto de agua mientras dure el alquiler. «En todos los casos, la responsabilidad sobre el cumplimiento de la legislación y el cuidado de la moto de agua corresponde al navegante durante el tiempo que dure el alquiler, excepto en aquellas materias que pertenecen exclusivamente al propietario de la embarcación como la matriculación de esta o contar con la documentación y el seguro de la moto de agua actualizados», apostilla Amanda Zaragoza.