Diez bodegas únicas en el mundo

Vendimia nocturna

Ubicada en el término municipal de Rueda , esta bodega debe su nombre al velo luminoso que envuelve los racimos al atardecer. Fundada en el año 2000, los vinos blancos de Aura son unos de los más expresivos de la D.O. Y esto se debe a su particular vendimia, realizada tras la puesta de sol. Durante los meses de septiembre y octubre, la uva se recoge a máquina entre medianoche y las 7 de la mañana y se traslada hasta la bodega en pequeños remolques.

La noche permite que las condiciones de entrada de la uva en bodega sean las mejores, pues con la luz solar la uva sufre oxidaciones que aromáticamente no interesan a la bodega. Para los mostos blancos el frío es muy importante y la vendimia de noche hace que entren en bodega a una temperatura óptima. La temperatura y la tranquilidad de la noche permiten preservar al máximo los aromas varietales, aportando al vino una elegancia y un sabor único, afrutado y fresco. La vendimia a la luz de la luna de Aura es algo digno de ver. ¿Recuerdas aquella escena nocturna de Un paseo por las nubes?

La suite de Gehry

El hotel Marqués de Riscal cumple 10 años, y qué mejor que celebrarlo durante el mes de la vendimia. El complejo, diseñado por el genial Frank O. Gehry entorno a estas históricas bodegas de la Rioja alavesa, cuenta con habitaciones de lujo, dos restaurante (Gastronómico Marqués de Riscal y 1860 Tradición, asesorados por el primer cocinero riojano galardonado con una estrella Michelín: Francis Paniego) y el mejor spa de vinoterapia de España, de la firma cosmética francesa Caudalíe.

La espectacularidad del edificio del famoso arquitecto canadiense que alberga el hotel, unido a la riqueza paisajística de los extensos campos de vid y las instalaciones de la bodega, la más antigua de la zona, ofrecen un marco excepcional para experimentar una vivencia única e irrepetible en la llamada Ciudad del Vino.

Exclusividad ecológica

El condado vitivinícola de Napa Valle, en California , es famoso en el cine, y es que hace tiempo que Estados Unidos ha empezado a tomarse en serio esto de la enología. Esta zona está repleta de bodegas, algunas prestigiosas como Odette Estate.

Lo primero que llama la atención es su espectacular diseño, obra de Signum Architecture , el estudio de arquitectura que ha conseguido aprovechar el paisaje de valles y colinas y las más de 2500 hectáreas de terreno que rodea a esta bodega. Dentro continúan las sorpresas. Odette Estate elabora un vino ecológico con certificado CCOF de primerísima calidad y cuenta con un club privado para personalidades selectas que pueden permitirse descorchar sus botellas más exclusivas, pues estas pueden llegar a costar 1.500 dólares .

Relax con Estrella Michelín

La bodega Abadía Retuerta apuesta por la gestión sostenible de las cerca de 700 hectáreas (200 de ellas de viñedo) que la rodean. De hecho, este ubicado en la Ribera del Duero es pionero en la tendencia mundial de hoteles bee-friendly, que apoya a los pequeños apicultores en su trabajo de recuperación de esta especie en peligro de extinción.

La visita a esta bodega se ha convertido en un must del aficionado al vino. Comienza con un apasionante paseo (a pie, en bici o a caballo) por el campo para pisar el terroir, descubrir el entorno, disfrutar del paisaje, la flora y fauna, y continúa de vuelta a esta abadía románica en El Refectorio , el restaurante galardonado con una estrella Michelin que alberga este hotel-bodega con servicio de concierge personal las 24h y spa sostenible bajo las antiguas caballerizas.

Una bodega submarina

Vina Maris es todo un referente internacional de las bodegas submarinas , y la visita a sus vinos envejecidos en las profundidades del mar Mediterráneo es la actividad enoturística más exclusiva del momento.

Se trata de la única bodega submarina de este mar y también es de las pocas que pueden visitarse en todo el mundo. Los más valientes pueden realizar inmersiones con instructores y buzos especializados para conocer las instalaciones bajo el mar. Ubicada en la costa de Calpe (Alicante), esta singular bodega produce dos vinos de crianza submarina con marca propia y D.O. Alicante: Vina Maris Monastrell y Vina Maris Chardonnay. Unas 1.000 unidades sumergidas a 30 metros de profundidad en jaulas de acero marino que alcanzan los 50€ por botella.

Vino arquitectónico

El estudio de arquitectura Archea Associati ha sabido sacarle partido a la orografía de Bargino para crear esta espectacular bodega de 49.000 metros cuadrados y 7 edificios interconectados, desde el piso subterráneo, donde descansan las botellas en barrica, hasta los pisos superiores para las oficinas, el restaurante y la sala de prensa. La forma ondulada de su fachada exterior, que simulan las colinas del paisaje toscano, no pasaron desapercibidas en la XIII Bienal de Arquitectura de Venecia, uno de los grande eventos de arte a nivel internacional. Viajar a Chianti , una de las regiones más bonitas de Italia y puede que de las que mejor vino producen del mundo y no visitar Antinori, es casi pecado.

Un MoMA entre viñedos

Dos hieráticos guardianes de hierro de Xavier Mascaro vigilan la entrada de la finca y nos dejan claro que en esta bodega lo menos sorprendente será catar vinos exquisitos. Esculturas de colores y formas imposibles, estudiadamente desperdigadas por los jardines que rodean los cinco edificios singulares de Bodega Otazu , conforman un peculiar museo al aire libre.

Al otro lado, el viñedo, y hasta donde alcanza la vista, una iglesia románica del siglo XII, una torre de defensa del XIV y un precioso palacio del XVI. Dentro del edificio más antiguo, una escultura de Manolo Valdés nos da la bienvenida a un museo del vino impropio de una bodega. Aquí, las máquinas y viejos útiles relacionados con el cultivo de la vid comparten escenario con imponentes obras de arte contemporáneo.

Un museo del vino y una galería de arte con obras de prestigiosos artistas internacionales, que conforma un MoMA en miniatura digno de ser visitado.

El sueño de Michel Jack Chasseuil

Michel-Jack Chasseuil es uno de los personajes más enigmáticos y curiosos del mundillo del vino. Un amante de los caldos que lleva años guardando con celo miles de botellas en su singular bodega, ubicada en el interior de la Chapelle-Bâton en la región francesa de Deubx-Sevres.

Considerada una auténtica joya enológica, su colección privada está formada por más de 40.000 botellas selectísimas de los siglos XVIII, XIX y XX, muchas de ellas magnum y vinos que datan desde 1.800 hasta la actualidad, que duermen amontonadas tras un sistema de seguridad electrónica, fuertes cerrojos y puertas de metal reforzado cerca de su casa en el oeste de Francia.

Grandes vinos procedentes de todas partes del mundo que Chasseuil pretende conservar con la ayuda de la Unesco, para que nadie se los beba jamás. Su sueño es que la bodega sea Patrimonio de la Humanidad y se niega a vender botellas a multimillonarios extranjeros con tal de mantener intacta la colección.

La Toscana catalana

En 1978 Josep Maria Albet i Noya representaba la Unió de Pagesos en el Consejo regulador de la D.O. Penedès cuando una empresa danesa se dirigió a la misma buscando un productor de vino ecológico. En ese momento no había ninguno en todo el estado y el Consejo comentó el tema con Josep Maria debido a su condición de vegetariano. Desde entonces hasta hoy sus vinos son el paradigma de la ecología más estricta, y sin duda son una de las innovaciones más apasionantes en el Penedès.

Así, la primera bodega nacional en elaborar vinos ecológicos , se ha abierto hueco en el mercado con unas etiquetas boutique, elaboradas de forma moderna y con un característico y personal estilo mediterráneo. Almorzar en esta magnífica finca, situada en Can Vendrell de la Codina, en el municipio de Sant Pau d'Ordal, es lo más parecido a vivir la experiencia de la Toscana… sin salir de España.

Un dormitorio histórico

Casi un kilómetro de calados del siglo XV recorren las bodegas subterráneas de Ollauri , en la Rioja. Un lugar único en el mundo que asume el legado de la antigua casa Paternina y de la marca histórica Conde de los Andes , uno de los grandes nombres de la elaboración y la cultura del vino de la Rioja Alta.

En el ancho valle del Ebro, a poca distancia de Haro y Briones, en un municipio pequeño y de larga historia vitivinícola, Bodegas Ollauri-Conde de los Andes retoma una tradición que se remonta a muchos siglos atrás. Fue en 1894 cuando Federico Paternina creó la moderna bodega donde sus antepasados hacían y guardaban vino desde el siglo XV. Hoy, recorrer este entramado subterráneo es de las experiencias enoturísticas más impresionantes de la Rioja. Por su antigüedad, por su arquitectura y por su extensión, de cerca de un kilómetro lineal.