El sencillo principio que ha ayudado a Jeff Bezos y Tim Cook a llegar donde están

Sin embargo, hay una clave mucho más sencilla y básica que una gran mayoría da por hecho y a la que no se le presta la atención que merece. Así lo explica el analista tecnológico Jason Aten en unas declaraciones para la revista Inc, poniendo como ejemplo a Jeff Bezos y Tim Cook , CEO de Amazon y Apple respectivamente y cuyos negocios facturan miles de millones al año.

«No hay manera posible de que alguien como Tim Cook o Jeff Bezos se ocupe de todo lo que conlleva dirigir sus respectivas empresas. Porque allí hay mucho más de lo que un individuo podría hacer», comienzó diciendo y explicó que ambos siguen un principio básico. Se trata de la regla del 'solo tú' , o lo que es lo mismo, asimilar la idea de que cada uno tiene unas tareas diarias y que debe saber delegar en su equipo, algo que a veces resulta más complicado de lo que pueda parecer.

«La belleza de esta regla es que tiene dos beneficios. El primero es que te ayuda a priorizar y gestionar el recurso limitado de tiempo que tienes cada día, ayudándote a centrarte en lo que absolutamente necesitas hacer con tu tiempo. La segunda es que te anima a dejar de pensar que eres la persona que debería hacer cosas que podría hacer igual de bien, o a menudo mejor, otra persona», puntualizó y añadió que «Como líder, hay cosas que sólo tú puedes hacer. Por ejemplo, sólo tú puedes tomar las decisiones estratégicas que determinan la dirección de su empresa. Bezos se refiere a ellas como decisiones de ‘puerta única’». Este tipo de decisiones serían aquellas en las que no se puede dar marcha atrás y que suponen cambios cruciales para la empresa.

Afirmo además que «El líder debe encontrar a las mejores personas que pueda para cualquier trabajo. Para que luego les brinde los recursos, el estímulo y la responsabilidad para que sean aún mejores. Y, a continuación, que se centre en hacer las cosas que sólo él puede hacer por el negocio. Es así de sencillo».

Para ejemplificarlo puso un ejemplo muy sencillo con el CEO de Apple: «No le interesa microgestionar cosas que no son su fuerte. Nunca se lo ha conocido como una persona que diseñe productos y, cuando se hizo cargo de Apple, no empezó a visitar repentinamente el estudio de diseño todos los días, como era conocido que hacía su predecesor, Steve Jobs. Siguió confiando en que ese equipo sabía lo que hacía».

La conclusión es sencilla: un buen CEO debe saber rodearse de un equipo excelente en el que poder tener plena confianza para poder distribuir las tareas sin preocupaciones y así centrarse en otros proyectos. Habrá que tomar nota.