Las nuevas tendencias en el sector del lujo que surgirán tras el coronavirus

Pero dejando esta industria a un lado, otra de las cuestiones que más interés suscita es el rumbo que seguirá el mundo del lujo, un sector que puede peligrar en tiempos convulsos y que sin embargo es mucho más estable de lo que pueda parecer a simple vista. De hecho, en más de una ocasión se ha demostrado que el lujo no es demasiado sensible a los ingresos , ni es reactivo a las recesiones. Si se tienen en cuenta los análisis de las crisis pasadas, como por ejemplo la del 2008, se confirma que el lujo sufrió menos que otros y se recuperó más rápido y de forma más eficiente.

La revista Forbes ha compartido una investigación realizada por el IMD Business School en la que se trataba este tema y que, tras teorías de todo tipo, se atreve a confirmar que los comportamientos de los usuarios cambiarán y que habrá una serie de puntos clave que protagonizarán los cambios que se verán en los próximos meses. El primero se refiere al proceso de fabricación. Gran parte de empresas de lujo poseen sus fábricas -o una parte muy amplia de su cadena de producción- en China, y lo más probable es que opten por la producción a nivel local con el fin de reforzar la industria de sus países de origen. Como consecuencia, los bajos costes que suponían estos procesos harían que se encareciesen los procesos de fabricación que se reflejarían también en los puntos de venta.

La pregunta es, ¿estaríamos ante una fase menos eficiente de globalización? Es más, en este supuesto escenario quizás incluso podríamos dirigirnos hacia estrategias en las que las marcas de lujo globales organizasen carteras de marcas de lujo locales. Otro de los aspectos a destacar se refiere a lo relativo al ritmo que se tiene que seguir a la hora de dar a conocer las colecciones.

En la etapa post pandemia los viajes serán más difíciles de gestionar, eso sin mencionar los eventos como grandes salones automovilísticos o fashion weeks, cuya organización conlleva meses de trabajo e implica una gran cantidad de desplazamientos, así que seguramente se apueste por un ritmo más pausado y técnicas de difusión centradas en los medios digitales . En este punto hay que recalcar que durante estos meses se ha acelerado este proceso a un ritmo vertiginoso así que la transición no será tan traumática como podría esperarse.

De igual modo, el tipo de compras cambiará y será clave asociar a las marcas buenas historias y conceptos con las que el usuario quiera empatizar. El estudio hace hincapié además en el resurgir del mercado del lujo de segunda mano que puede contribuir a aportarle un nuevo valor y una circularidad al mercado que crearía nuevas oportunidades de asociación entre las firmas. A eso hay que sumarle la mentalidad de las empresas, que tendrán que dejar de lado sus modelos de actuación tradicionales para adoptar una mayor agilidad con la que desarrollar la resiliencia y así tener más opciones para recuperarse. Cuanto más hábil sea, más fácil le resultará evolucionar.

Otros aspectos muy interesantes los encontramos en el informe “Restart: 10 Post Covid-19 Trends”, realizado por la consultora de innovación Opinno , en el que se definen algunas de las corrientes que podrían comenzar a repuntar después del Covid-19. Pedro Moneo, fundador de dicha consultora explica que todo se hará mucho más sostenible tanto con el medio ambiente con la sociedad. “En el mundo del lujo la ética estará mucho más presente tanto en la producción como la distribución. Pero no solo eso, también a la hora de comprar se buscará contribuir a mejorar causas sociales”.

El CEO opina que se tenderá a ensalzar figuras de carácter social que hayan contribuido a mejorar la situación actual, especialmente en aquellas labores que tienen mucho trabajo detrás y poco reconocimiento como por ejemplo el mundo científico y que desde que comenzase la pandemia está ganando más visibilidad gracias también a las asociaciones con firmas de lujo que les están ayudando a ganar más visibilidad. “La credibilidad de las fuentes de información se volverá estratégica, igual que la transparencia y el conocimiento profundo, elementos que deberán convertirse en los nuevos valores y pilares de cualquier marca que quiera sobrevivir”, añade.

Otro tema que se aborda en el informe es un capitalismo responsable y que muchos de los productos que se produzcan a partir de ahora tendrán que desarrollarse en un entorno digital por defecto. “Por ejemplo, McLaren y otras escuderías automovilísticas poseen en sus maquinarias ordenadores de los años noventa, que en vista de la evolución que presentan otras marcas como Tesla, cuyos coches tienen más potencia que un Lamborghini o un Bugatti, empujarán a que la tecnología tenga un papel más decisivo en todas las industrias del lujo”.

Mirándolo desde un punto de vista esperanzador para el sector, nos quedamos también con las afirmaciones de diseñadores como Armani o grandes empresarios como Bernard Arnault, propietario del grupo LVMH que defienden que los grandes momentos de crisis suponen un impulso para la creatividad que supondrá un soplo de aire fresco para el mundo del lujo, y todo sea dicho, un gran desafío. Pero lo que tienen claro es que no va a desaparecer y probablemente con el paso del tiempo se verá incluso más reforzado .