Cómo combinar los chinos para ir al trabajo, salimos de dudas

Este último da más rabia si cabe que los dos primeros ejemplos porque los chinos son una prenda muy versátil, tanto que no tiene mucho que envidiar a los vaqueros en ese sentido. Sin embargo, parece destinada a un papel reiterativo dentro del estilo masculino, y mira que es fácil romper con los prejuicios que recaen sobre él. Basta con tener claros apenas cinco consejos para aportarles vida y personalidad, y triunfar con ellos en la oficina (y fuera de ella).

El chino con zapatos, jersey, camisa lisa y americana ya sabemos que funciona, pero puedes optar a convertirlo en algo más que parte de un uniforme de trabajo. Dale un toque más relajado aprovechando que es la tendencia hacia la que camina la moda actual. Y no hablamos de lucirlos en clave casual friday necesariamente, sino con chaquetas alternativas a la blazer con la sahariana , renunciando al jersey si el tiempo lo permite, o apostando por algún diseño con un aire más informal, que también los hay.

También puedes plantearte ampliar la paleta de colores. Haces bien en ser fiel al beis y al azul marin o, infalibles ambos, y no se trata de que renuncies a ellos, pero hay colores en los que el chino es más original y al mismo tiempo estiloso. El caqui, el verde botella, el granate y sobre todo el negro son alternativas muy interesantes. Esta última tiene la ventaja de que funciona bien con todo tipo de calzado y con prendas formales, típicas compañeras del chino, pero también con sudaderas, por ejemplo.

Si hablamos de calzado, con zapato clásico funciona siempre , ya sea de ante, con suela de goma, mocasín o náutico en verano, e incluso un brogue u otro modelo más serio. Pero si quieres llevar un chino sin que parezcas un clon de otros miles de hombres que van a trabajar a la oficina, apuesta por unos botines chelsea o incluso por una bota tipo militar en color marrón para salirte un poco de la vía principal y darle tu sello al look.

Por otro lado, debes explotar sus virtudes en clave casual friday . La tentación de apostar por los vaqueros es grande los viernes de oficina pero amplía tu visión y aprovecha el chino para lavarle la cara y dar una lección de estilo a los compañeros. Prueba lo bien que funcionan con unas deportivas básicas blancas y unos calcetines estampados, y no dudes en llevarlos con sudadera, o un abrigo o chaqueta informal si el código de vestimenta de la empresa te permite esa licencia. Ahora que es otoño, chinos beis y sherpa -chaqueta vaquera con borrego-, por ejemplo, ¿por qué no?

De hecho, combinar texturas y proporciones es una acertadísima decisión. Los chinos son pantalones elaborados con tejidos suaves que combinan de maravilla con otras prendas similares en cuanto a la confección como el algodón. De igual modo suelen agradecer algún detalle en la chaqueta o jersey, sobre todo en el caso de la americana, como los estampados elegantes o los tejidos granulosos. Y, sin duda alguna, también parecen pantalones mucho más “vivos” si juegas con las proporciones. Por ejemplo, haciéndote con un diseño más holgado del habitual y doblando sus bajos para estilizar la figura y dar protagonismo al calzado, especialmente cuando los lleves con botines en vez de con zapatos, o incluso con zapatillas.