Los únicos tratamientos que funcionan para combatir la caída del pelo según los médicos

En primer lugar hay que diferenciar el tipo de caída del pelo. En otoño o primavera muchas personas sufren la caída estacional o muda del cabello, que según la doctora Cristina Morante, experta en medicina capilar de IML Clinic, «responde a la muda normal del mamífero, en mayor o menor medida según el grosor del mismo y la densidad. La caída estacional del cabello es un proceso que forma parte del ciclo natural del crecimiento capilar. A lo largo del año, el cabello pasa por tres fases: crecimiento (anágena), reposo (catágena) y caída (telógena). En otoño, debido a la adaptación del cuerpo al cambio de estación, el cabello entra en la fase telógena, lo que se traduce en una mayor caída. Este tipo de caída es temporal y, aunque puede alarmar, generalmente no es motivo de preocupación».

El efluvio telógeno es una patología que sufren más del 50% de mujeres en algún momento de su vida, y en mayor medida algunos hombres. «Se trata de un incremento repentino del porcentaje de cabello en fase de caída que se produce una pérdida de pelo llamativa superior a la media de más de 100 pelos al día. No obstante, es un proceso reversible y autolimitado en el tiempo, desencadenado generalmente por una causa concreta, como el estrés, factores hormonales, como el parto o la menopausia, eventos traumáticos, infecciones agudas, enfermedades o déficits nutricionales o vitamínicos», explica la doctora Raquel Amaro, de la clínica Hospital Capilar. Para combatirlo, hay que encontrar la causa y corregirla.

La que afecta, en mayor medida a los hombres, y también a algunas mujeres, es la alopecia androgénica. La doctora Caggiano de Hospital Capilar señala que «este tipo de alopecia provoca la pérdida irreversible del cabello de manera progresiva. En hombres se manifiesta en el retroceso de la línea frontal y falta de densidad en coronilla, mientras que en las mujeres presenta un patrón más difuso, afectando a todo el cabello, aunque se evidencia más en la línea de peinado. Este tipo de alopecia cuenta con tratamientos farmacológicos eficaces para combatirla que requieren un manejo y seguimiento médico. Estos tratamientos se pueden dividir en tres escalones según su efectividad (vía oral, infiltrados y tópicos) que en muchas ocasiones pueden combinarse para obtener mayores resultados».

Estos son los tratamientos farmacológicos (requieren una prescripción y un seguimiento médico) que han demostrado eficacia en el tratamiento de la alopecia, según nos explica el doctor Javier Rivero de Clínica Ferraro:

- Minoxidil tópico: estimula el crecimiento del cabello y prolonga la fase de crecimiento del folículo piloso. Es uno de los tratamientos más utilizados y estudiados, demostrando una mejora significativa en muchos casos.

- Finasterida oral: Inhibe la enzima 5-alfa reductasa, que convierte la testosterona en dihidrotestosterona (DHT), una hormona implicada en la miniaturización de los folículos pilosos. Muy eficaz para tratar la alopecia androgenética en hombres, pero no está indicado en mujeres.

- Dutasterida oral: Similar al finasteride, pero inhibe tanto la 5-alfa reductasa tipo I como tipo II. Más potente que el finasteride, pero también con mayores posibles efectos secundarios.

Uno de los productos más habituales y al alcance de todos son los champús y lociones anticaídas. La doctora Caggiano explica que «los champús y lociones anticaída no deben asumirse como tratamientos únicos y aislados de una alopecia, sino como un complemento para fortalecer el cabello. Este tipo de productos no funcionan si se emplean como único medio para combatir la alopecia. No obstante, en combinación con el tratamiento médico adecuado, sí resultan beneficiosos en términos de mantener una correcta salud e higiene del cuero cabelludo». El doctor Rivero añade que «la mayoría de estos productos se aplican tópicamente y, aunque contengan ingredientes activos, tienen dificultades para penetrar profundamente en el folículo piloso, donde se originan los problemas de caída».

Otros de los productos estrella para tratar la caída del pelo son las vitaminas y suplementos nutricionales. El doctor Rivero explica que «los estudios científicos sobre la eficacia de los suplementos nutricionales para la caída del cabello son algo contradictorios. Si tienes una alopecia significativa, los suplementos no deben sustituir a los tratamientos médicos». Por su parte, la doctora Caggiano comenta que «los suplementos nutricionales son efectivos para combatir la caída del cabello en pacientes con efluvio telógeno por déficit nutricional o para complementar un tratamiento antiandrogénico de caída en la fase de recuperación de las unidades foliculares miniaturizadas». Por lo tanto conviene que formen parte de todo el tratamiento conjunto recomendado por un médico experto para hacer frente a la caída del pelo.

La única solución válida para remediar la calvicie es el injerto capilar, sin embargo, sí hay tratamientos médico-estéticos que pueden frenar el avance de la alopecia androgénica. El diagnóstico precoz en este sentido es fundamental. Entre estos protocolos los expertos señalan el Plasma Rico en Plaquetas que, como explica el doctor Rivero «utiliza el propio plasma del paciente, rico en factores de crecimiento, para estimular la regeneración celular y el crecimiento capilar. Se inyecta directamente en el cuero cabelludo. Está indicado para personas con alopecia androgenética, pérdida de cabello difusa y quienes buscan un tratamiento natural».

La doctora Caggiano también incluye en estos tratamientos efectivos contra las alopecias androgénicas la mesoterapia capilar «con vitaminas y fármacos. La infiltración subdérmica en el cuero cabelludo de fármacos antiandrogénicos en conjunto con vitaminas actúan en profundidad frenando la pérdida capilar y fomentando el crecimiento del pelo. En pacientes con alopecia androgénica es conveniente combinar el tratamiento farmacológico oral elegido con los tratamientos de mesoterapia para potenciar los resultados».

Además, también están recomendados el Láser de baja intensidad, que según explican desde la Clínica Ferraro, «utiliza una luz de baja intensidad para estimular las células del cuero cabelludo y promover el crecimiento capilar. Se puede realizar en casa o en una clínica. Aconsejado para personas con alopecia androgenética y pérdida de cabello difusa, este tratamiento reduce la inflamación, aumenta la energía celular y puede ayudar a prolongar la fase de crecimiento del cabello». Y finalmente, el microneedling, que «crea microcanales en el cuero cabelludo para estimular la producción de colágeno y elastina, mejorando la circulación y el crecimiento capilar. Se aconseja para personas con cicatrices en el cuero cabelludo o pérdida de cabello difusa».