Déjate crecer el bigote: llega Movember

Todo surge en la barra de un bar de Melbourne en el año 2003, cuando Travis Garone y Luke Slattery se proponen como desafío convencer a 30 amigos de volver a poner de moda el bigote. Y, de paso, generar conversación sobre el cáncer de próstata como ya se hacía con el cáncer de mama. Cada uno invirtió entonces 10 euros en la Fundación contra el cáncer de próstata en Australia (PCFA) , decidieron sentar unas bases y un año después adoptarían esta causa como suya al registrar lo que hoy se conoce como ‘Movember’.

Una iniciativa que recibe su nombre de la unión de las palabras “moustache” (bigote) y “november” (noviembre) a la que España fue el primer país en unirse formalmente. Tanto es así que cada vez son más las personas o empresas que se unen a este movimiento dentro de nuestras fronteras. Un ejemplo de ello son Caroli Health Club y la barbería Malditos Bastardos, que han querido unir fuerzas y crear un tratamiento facial para hombre que consiste en afeitado o arreglo y posterior ritual after shave para aliviar las irritaciones; que destinará el 20% de su recaudación a la Fundación Movember.

También las firmas de cosmética masculina han encontrado en este plan una fórmula perfecta para promocionar sus líneas de grooming.

El bigote exige el uso de productos específicos de la misma forma que no dejar pasar más de una semana entre cada arreglo o afeitado. Entre los cuidados básicos que necesita está la limpieza en profundidad con jabón libre de detergentes o champú para vello facial, secado perfecto para evitar restos de humedad, aplicación de loción hidratante para ganar en brillo, peinado y, por supuesto, recorte constante para dar el largo y grosor que busques ( aquí tienes una guía sobre cómo hacerlo también si tienes barba ).

La forma de tu rostro indicará qué estilo te sienta mejor si te has decidido a lucir ‘ mo ’. Si tu cara es alargada puedes atreverte con el clásico modelo inglés con las puntas hacia arriba, por ejemplo; pero si es rectangular, lo mejor es que optes por todo lo contrario y te decantes por uno de herradura que baja hasta la barbilla. Más discreto es el conocido como bigote lápiz que deja una fina línea de vello sobre los labios, o el piramidal con el que hemos visto a famosos como Brad Pitt, Adam Levine o Michael Fassbender en los últimos años. Por último, si presumes de rostro cuadrado, no tengas miedo al volumen y llévalo frondoso como lo hacía Freddie Mercury.

Y es que si vas a dejarte crecer el bigote, ¿por qué no hacerlo bien?