Los tres primeros discursos o el lugar de residencia: las primeras decisiones del nuevo Papa marcarán su Pontificado

Como debe retirar los sellos que desde la tarde del día en que falleció han impedido el paso a las habitaciones que ocupó Francisco y a las zonas donde trabajó, podrá tomar valorar todas las opciones sobre la mesa antes de tomar la decisión.

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Javier Martínez-Brocal

A partir de este momento, los principales interlocutores del Papa para organizar los próximos días son el sustituto de la Secretaría de Estado, el venezolano Edgar Peña Parra, y quien hace las veces de prefecto de la Casa Pontificia, Leonardo Sapienza. Con ellos pasará gran parte de su tiempo. También le ayudará uno de los secretarios privados del Papa Francisco, seguramente Daniel Pellizzón, encargado del relevo con los hombres de confianza del nuevo Pontífice.

Muy pronto serán convocados los primeros actos de su pontificado: una misa con los cardenales electores mañana, que marcará el final del cónclave; una audiencia con todos los purpurados para saludar también a los mayores de 80 años; una posible visita a la tumba de Francisco en Santa María la Mayor; y una audiencia con los periodistas que se han acreditado para cubrir el funeral de su predecesor y el cónclave. Es muy probable que la 'Misa de inicio de pontificado' para la que los gobiernos enviarán delegaciones oficiales, se celebrará el domingo 18 de mayo, aunque el Vaticano aún no lo ha confirmado.

También es tradicional que entre hoy y mañana intercambie un mensaje de saludo con el Rabino Jefe de Roma, un breve texto dirigido a quienes Juan Pablo II llamaba «nuestros hermanos mayores».

Su primer gran discurso al mundo será el ángelus de este domingo, una reflexión de unos diez minutos, en la que cada una de sus palabras será escrutada con lupa. En 2013, Francisco dedicó su primer ángelus a la cuestión de la misericordia de Dios, que luego fue el hilo conductor de la primera fase de su Pontificado.

Debe también tomar una decisión sobre si renovar o no a los altos cargos del Vaticano, sus principales colaboradores al frente de la Curia que renunciaron automáticamente en el instante en el que comenzó la Sede Vacante. Francisco esperó tres días antes de renovarles provisionalmente con la fórmula 'donec aliter provideatur', «hasta que no se provea de otro modo», pues decidió «reservarse un tiempo para la reflexión, la oración y el diálogo, antes de cualquier nombramiento definitivo o confirmación». Es probable que haga algo parecido. Será su primera decisión de gobierno.

En estas primeras horas de Pontificado podría visitar la basílica de San Pablo Extramuros, donde está la tumba del apóstol de los gentiles. Benedicto la visitó un día después de su misa de inicio de Pontificado. También se da por seguro que el nuevo Papa mantendrá un encuentro con los participantes en el inminente Jubileo de las cofradías, previsto para el próximo fin de semana, entre el 16-18 de mayo, días en los que evidentemente su agenda estará ya bastante completa.

Serán días también de sorpresas. La tarde después de su elección, Benedicto XVI se trasladó a su apartamento para consultar unos libros y preparar la homilía de su misa; y Francisco fue a la residencia que había ocupado durante el precónclave para pagar la factura. Valdrá la pena estar atentos porque, igual que entonces, estos gestos darán pistas sobre el rumbo inmediato y lejano que el Papa quiere marcar para la Iglesia católica.