¿Sabe realmente lo que come su perro?: Consejos para mejorar la alimentación de su mascota

Un estudio realizado por Edgard & Cooper especializados en alimentación natural refleja que el 96 % de los españoles está totalmente convencido que la alimentación de sus mascotas influye en la vida del animal a largo plazo. Aunque hay que destacar y sorprende el grado de desconocimiento que existe a la hora de diferenciar los ingredientes adecuados para la perfecta salud de su querida mascota.

La premisa de si comes mal, te sientes mal cobra relevancia y hay que trabajar en ella día a día si no queremos que nuestro compañero sufra problemas digestivos, sobrepeso u obesidad así como otras dolencias renales crónicas. Tal es el grado de desinformación que —según esta encuesta— el 35% de los encuestados afirma no saber los ingredientes que componen la comida que les da a su mascota.

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Para ello, es importante una labor de educación y concienciación para dar alimentos más equilibrados a nuestro compañero. La recomendación de un veterinario (72%) y el conocimiento de la composición de los alimentos (61%) fueron los principales motivos citados por los encuestados para considerar un cambio de marca (37%).

Es importante educar a las personas sobre la selección de alimentos de calidad y entender los ingredientes presentes en ellos. Así el 61 % estaría dispuesto a considerar una nueva marca si conociera mejor la composición de los alimentos. Nuestras mascotas dependen de nosotros para mantenerse en plena forma. Es por eso que es esencial que haya más claridad sobre los componentes. Por encima de todo hay que proporcionales una dieta sana y sabrosa.

En los envases en el lugar en el que aparecen los ingredientes es muy importante conocer la diferencia que existe entre dos términos presentes en este estudio: harinas de carne y carne fresca (un 35% de los encuestados afirma no saber que proporcionar a sus mascotas y la calidad de comida que les ofrecen). Por ello, en lugar de recurrir a la utilización de carne elaborada, a veces de otros subproductos animales (huesos, pezuñas o plumas) mediante un proceso de calentamiento, es más adecuado escoger carne fresca, combinada con una variedad de frutas, verduras e incluso pescado.

Para ello se utilizan métodos de calentamiento menos procesados y más adecuados a la hora de elaborar la comida de nuestras mascotas. El empleo de carne fresca favorece una mejor digestión el 42% de los casos, según varios estudios científicos. Este estudio ha reflejado la gran importancia de educar a los dueños de mascotas sobre la selección de alimentos de calidad y al mismo tiempo de la comprensión de la composición de los ingredientes presentes en ellos.

Los animales se aburren de comer siempre lo mismo y hay alternativas. Una que está teniendo últimamente gran auge es la dieta Barf. Diseñada por un veterinario australiano llamado Ian Billinghurst. Se basa en la concepción de que los perros están diseñados para comer alimentos crudos. La dieta propone una alimentación a base de proteína de origen animal, a la que se añade un pequeño porcentaje de frutas y verduras. La dieta BARF se compone básicamente de: 60% de huesos con carne y músculo, 25% de carne magra (puede ser pescado), 15% de fruta y verduras crudas, huevos y vísceras, no contiene conservantes ni cereales.

De siempre se ha dicho que la carne es para los perros y el pescado para los gatos, pero hoy en día en la alimentación para mascotas esa limitación no existe y ya se pueden encontrar piensos para perros con salmón, bacalao, trucha, atún y merluza... Ante esta 'novedad' surge la pregunta ¿Es bueno el pescado para los perros? Nutricionistas consultados aseguran que sí.

Que nuestros perros coman pescado o proteína marina es bueno y lo más importante, saludable. Entre los beneficios y propiedades que posee el pescado podemos decir que: es una gran fuente de proteínas, En concreto , el pescado blanco aporta muchas vitaminas del grupo B (siendo las más destacadas la B3, la B9 y la B12) y del grupo A, los minerales como el fósforo y el calcio también están muy presentes en este alimento. En el caso del pescado azul, se pueden destacar las siguientes vitaminas: la A, la D, la B3, la B2, la B1 y la B12 y también es muy rico en ácido graso Omega 3, sobre todo el pescado azul.

Este alimento es rico en aminoácidos, las calorías que se ingieren a partir de este producto no son muy altas. Además tiene la capacidad de mejorar la salud del pelo, de la piel y del sistema inmune y el consumo de pescado blanco ayuda a prevenir el desarrollo de patologías como la artritis, la osteoporosis o la artrosis.

No solo de pienso —en lata o en seco— se alimentan nuestros perros. La fruta y la verdura también pueden formar parte de su dieta... y además en la mayoría de los casos puede ser una recompensa más que saludable.

Sin embargo, para los perros hay algunas que son recomendables y otras no. Siempre, como en todo lo referente a ellos, consulte con su veterinario, él es el único que le puede resolver sus dudas. También hay que tener en cuenta que cuando le de a su perro nuevos alimentos, estos deben ser introducidos poco a poco sobre todo para evitar dos cosas: primero el rechazo y segundo evitar posibles problemas digestivos. Si su perro cuando está usted comiendo una naranja se muestra curioso —no hay que olvidar que esta fruta desprende un aroma atrayente— pruebe a darle unos trocitos. Tras esto y si se las ha comido vigile si dentro de las siguientes 24 horas el animal no presenta algún síntoma fuera de lo normal (diarrea o malestar).

Si todo ha ido normal, puede ponerle de vez en cuando algunos trozos de fruta; pero no de forma continuada. Los veterinarios consultados recomiendan que no más de tres veces por semana se puede añadir algún trozo de fruta. Además, no debe olvidar que, las frutas son buenas para la salud; pero también contienen azúcar.

Detrás de un can o un gato vegetariano, por lo general hay un dueño que también lo es. En Gran Bretaña hay alrededor de 50.000 casos, mientras que en Estados Unidos se duplica esta cantidad.

Expertos en nutrición animal aseguran que lo que sucede con la alimentación de las mascotas es que en determinadas circunstancias tratamos de humanizarlas y darles lo mismo que queremos para nosotros sin darnos cuenta si esa actitud es la correcta.

En algunas ocasiones esta decisión se debe a que los ejemplares que conviven con personas vegetarianas adaptan la forma y costumbre de alimentarse de sus dueños. Unos estudios recientes realizados por veterinarios de Estados Unidos y publicados en 'NewScientic', sugieren que las necesidades nutricionales de un perro o un gato pueden satisfacerse con vegetales. Sin embargo hay veterinarios que están en contra.