Un riñón y un hígado nuevos: la «suerte» de Carmen y de otros 6.000 trasplantados

A esta valenciana, el trasplante le cambió «total y absolutamente» la vida: «A la familia del donante le doy las gracias en mayúsculas»

España alcanza el máximo de trasplantes de su historia, con 5.861 en 2023

Médicos realizan un trasplante en el Hospital Universitario La Paz de Madrid en 2017 AFP

Madrid

17/01/2024 a las 20:20h.

A Carmen, someterse a un trasplante le cambió «total y absolutamente» la vida. Con 38 años le diagnosticaron poliquistosis hepatorenal, una enfermedad por la que los riñones y el hígado se le llenaban de quistes que iban creciendo, de manera que sus órganos dejaban ... de funcionar bien. Al aumentar estos cada vez más su tamaño, parecía además que estaba embarazada. Apenas se podía agachar y no tenía casi movilidad. Estaba a punto ya de comenzar con el tratamiento de diálisis cuando recibió la llamada que toda persona en su situación desea: había un riñón y un hígado disponibles para ella.

Carmen se sometió al trasplante cuando solo llevaba un mes en la lista esperando unos órganos compatibles para ella. «Tuve mucha suerte, porque hay cien mil factores para encontrar unos órganos compatibles, pero en mi caso coincidieron muchas cosas y llegó muy pronto», explica esta valenciana en conversación telefónica con ABC. Su caso es solo un reflejo de las implicaciones que tiene el sistema de donación de órganos y trasplantes de España, líder en todo el mundo, en la vida de las personas. El año pasado, nuestro país volvió a batir récords y realizó casi 6.000 trasplantes (5.861), con una tasa de 122,1 intervenciones por millón de habitantes, según el balance anual de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT).

Los trasplantes fueron posibles gracias a la donación de órganos, que recuperó los niveles prepandemia -tras sufrir un descenso durante los años anteriores a causa del Covid-19- y volvió a crecer en 2023. Así, el año pasado, 2.346 personas donaron sus órganos tras fallecer, lo que supone una tasa de 48,9 donantes por millón de personas, el 7 por ciento más que en 2022. También aumentó el número de donantes vivos, con 433 personas que donaron un riñón en vida, un 34 por ciento más que el año anterior.

Estas cifras demuestran, en palabras de la ministra de Sanidad, Mónica García, que presentó este miércoles el balance en una rueda de prensa, «un contundente éxito del sistema nacional de trasplantes, que no solo destaca por ser un modelo de excelencia a nivel mundial, sino también como el reflejo de una sociedad profundamente comprometida con el valor de la solidaridad y la importancia de salvar vidas». Por su parte, Beatriz Domínguez-Gil, directora general de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), puso el foco en los donantes y en sus familias, «que en el momento más trágico dicen que sí».

90 donantes

Desde la entrada en vigor de la Ley de Eutanasia en 2021, 90 personas fallecidas así han donado sus órganos, que han sido trasplantados a 249 receptores.

Precisamente en la familia de su donante ha pensado muchas veces Carmen. A ella el trasplante le cambió la forma de vivir. «Me dio vida, calidad de vida», asegura. «He pensado mucho en los familiares porque creo que somos la cara B de una desgracia. Una donación de órganos viene de una muerte, de un proceso doloroso para la familia... así que a la familia solo le daría las gracias, gracias en mayúsculas», relata.

Apoyo psicológico

También para los trasplantados es un proceso psicológicamente muy duro, con un miedo que está presente en la persona todo el tiempo. Por eso, para Carmen es también muy importante reconocer, además del trabajo «impecable» del personal médico que la atendió, el apoyo psicológico que tanto ellos como sus familiares y amigos le dieron en todo momento.

En 2023 la media de donantes diarios fue de 8; y la de trasplantes realizados cada día, de 16. Aumentaron todo tipo de trasplantes y cobró especial importancia la donación en asistolia, es decir, de personas que fallecen por parada cardiorrespiratoria. Hubo un total 1.050 donantes de este tipo, un 15 por ciento más que en 2022, hasta el punto que supusieron el 45%, casi la mitad, del total de donantes de órganos de 2023.

4.794 personas en lista de espera

Pese al aumento de trasplantes, 2023 terminó con 4.794 personas esperando un órgano compatible, cifra similar a la del año anterior. Aparte había 75 niños.

Por comunidades autónomas, hubo 10 que superaron los 50 donantes por millón de población y de ellas se situaron por encima de los 70: Cantabria, Navarra y Murcia . Destacó también la actividad que tuvieron autonomías como la Comunidad Valenciana y Andalucía y las que más crecieron en donación de órganos fueron Murcia, con un 49 por ciento más, Madrid (24% más) y Castilla- La Mancha (22% más).

El Hospital La Fe de Valencia, donde se realizó el trasplante de Carmen, fue precisamente el centro que más trasplantes hepáticos y cardíacos llevó a cabo el año pasado. También destaca el Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia por ser el que más donantes registró.

España supera con creces sus tasas de donación de órganos respecto al resto de países. Mientras la media de la Unión Europea se sitúa en 20,9 donantes por cada millón de habitantes, la de nuestro país es de 48,9, muy por encima también de la de otros países como Alemania (10,4), Italia (25%) o Francia (25,8). Se aproxima Estados Unidos, con una tasa de 44,5 donantes por millón de población, aunque el perfil del donante, explicó la directora general de la ONT, es muy diferente entre los dos países. Mientras en España el perfil es sobre todo de una persona mayor -el donante más longevo de 2023 tenía 92 años- que fallece por causas naturales, en Estados Unidos suele ser bastante más joven y, en muchas ocasiones, ha muerto por causas no naturales: el 17 por ciento de los donantes del país fallecieron por sobredosis.