Unos padres rechazan una cirugía que salvará la vida a su bebé si la sangre está «contaminada por la vacunación»
Los servicios de salud llevaron a los tribunales la tutela de un niño de cuatro meses cuyos padres no permitieron que se le realizara una operación de corazón
Los padres de un niño de cuatro meses que necesita una cirugía cardíaca para salvarle la vida se niegan a continuar con el procedimiento a menos que la sangre utilizada provenga de donantes que no fueron vacunados contra el Covid-19.
La pareja ... de Nueva Zelanda habló en una entrevista publicada el lunes de sus reservas sobre la cirugía a corazón abierto, que su hijo necesita desesperadamente para tratar la estenosis severa de la válvula pulmonar.
«No queremos sangre contaminada por las vacunas», dijo el padre en la entrevista con la activista contra las vacunas Liz Gunn. «Ese es el final del trato: estamos de acuerdo con cualquier otra cosa que estos médicos quieran hacer».
Como resultado, la agencia de salud de Nueva Zelanda llevó a los padres a los juzgados, con la esperanza de que la tutela del niño enfermo se transfiera a los tribunales para que el bebé pueda recibir la cirugía necesaria, según el 'NZ Herald'.
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Paul White, abogado de la agencia de salud del país, Te Whatu Ora, señaló el miércoles que el caso debería resolverse rápidamente porque un niño con la misma afección habría sido tratado semanas antes.
La abogada de los padres, Sue Grey, dijo que el caso era diferente de otros de tutela médica en los que los padres se niegan a recibir atención médica. «Debido a que etiquetan a mis clientes como teóricos de la conspiración, su posición es que cualquier cosa que digan mis clientes puede ser ignorada», indicó Gray.
Alrededor de 100 antivacunas se reunieron frente a la corte durante la reunión del miércoles, según los medios locales. Se ha programado otra audiencia para el próximo martes.
El Servicio de Sangre de Nueva Zelanda dijo que la sangre no se dividió según si los donantes estaban vacunados. También afirmó que no había evidencia de que hubiera algún riesgo en el uso de sangre de una persona vacunada.
«Toda la sangre donada también se filtra durante el procesamiento, por lo que cualquier rastro que aún pueda estar presente no representa un riesgo para los destinatarios», añadió la agencia.
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