La discreta reunión del Papa con su número dos en el Gemelli

Este tipo de reuniones del Papa con cardenales, técnicamente llamadas «consistorios», se celebran una o dos veces al año, para establecer fechas de grandes ceremonias, y para abordar reservadamente cuestiones delicadas. La noticia ayer sorprendió sorprendió entre los observadores vaticanos, pues no pasa desapercibido que Benedicto XVI anunció su renuncia precisamente en un consistorio convocado con la excusa de fijar fechas de varias ceremonias de canonización.

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Es verosímil que la reunión del Papa con Parolin y Peña Parra fuera breve pero intensa pues como resultado este martes se anunció también el nombramiento de cinco nuevos obispos, se aprobó la renuncia de otro, y Francisco otorgó a la futura gobernadora del Vaticano facultades técnicas hasta ahora reservadas a un cardenal. Raffaella Petrini se convertirá el sábado en la primera mujer que ocupa este cargo. La ley vaticana lo reservaba al «cardenal presidente de la Comisión pontificia para el Estado Ciudad del Vaticano», pero como ella no es cardenal, el Papa le ha «atribuido personalmente la facultad de disponer y conferir, según convenga, competencias específicas o tareas particulares».

Francisco firmó también siete decretos sobre procesos de canonización, como el reconocimiento de las «virtudes heroicas» del mallorquín Miguel Maura Montaner (1843-1915), fundador de las Hermanas celadoras del Culto eucarístico; la canonización del médico venezolano José Gregorio Hernández (1864-1919), figura muy popular entre los católicos del Caribe, y las «virtudes heroicas» del sacerdote estadounidense Joseph Kapun, que falleció en 1951 en un campo de prisioneros en Corea del Norte.

También ayer el Papa publicó su tradicional mensaje para la Cuaresma, con firma del pasado 6 de febrero, ocho días antes de ingresar en el hospital. «Espera, que no sabes cuándo vendrá el día ni la hora. Vela con cuidado, que todo se pasa con brevedad», avisa en el texto, citando a santa Teresa de Jesús.